Angela Bassett se debió coger un cabreo monumental después de escuchar que el Oscar a la mejor actriz de reparto se lo llevaba Jamie Lee Curtis. Era la segunda vez que la actriz afroamericana optaba al premio (fue nominada en 1994 por 'Tina', el biopic de Tina Turner) y se fue de nuevo con las manos vacías.
El de actriz de reparto era uno de los premios más inciertos. Bassett obtuvo el Globo de Oro y el Critics Choice, mientras que Jamie Lee se alzó con el galardón del sindicato de actores y Kerry Condon se hizo con el Bafta.
Una de las tres se iba a llevar el Oscar, que finalmente fue a parar a la hija de Tony Curtis y Janet Leigh por su hilarante papel en 'Todo a la vez en todas partes'. Un premio muy merecido para la veterana protagonistas de la saga 'Halloween' que no sentó nada bien a Basset.
En las imágenes se puede ver como, a diferencia del resto de candidatas, en ningún momento aplaude a Curtis y su cara es de evidente malestar.