El ministro de Defensa de Reino Unido, Ben Wallace, ha aclarado y matizado sus polémicas declaraciones de mediados de semana, en las que aconsejó a Ucrania dar muestras de gratitud por el continuo suministro de armas por parte del Gobierno británico desde el estallido de la guerra, en febrero de 2022.
"Hablé sobre la necesidad de que Ucrania a veces reconozca que en muchos países y en algunos parlamentos no hay un apoyo tan fuerte como en Reino Unido. No es un comentario sobre los gobiernos, sino más bien sobre los ciudadanos y diputados en toda la comunidad internacional", ha dicho Wallace en su perfil de Facebook.
Así, Wallace ha aclarado que su intención era poner en valor que tanto la población como el Parlamento están de acuerdo con Downing Street en el constante apoyo a Ucrania. "Mis comentarios tenían la intención de reflejar que (...) deben hacer un esfuerzo para llegar a otros ciudadanos que aún necesitan ser convencidos", ha añadido.
En este punto, el ministro británico ha asegurado que personalmente seguirá apoyando a Ucrania "hasta el final y el tiempo que sea necesario" hasta vencer la guerra contra Rusia, y ha abogado por consolidar las buenas relaciones de amistad entre ambos gobiernos.
Por otro lado, durante su declaración del miércoles, Wallace recordó una anécdota de su primera visita a Kiev, donde tras once horas de viaje recibió un listado con sus principales demandas armamentísticas de Ucrania. En este punto, el ministro respondió que Londres no era Amazon, el servicio de comercio electrónico.
"Los comentarios sobre Amazon se hicieron el año pasado para enfatizar que las relaciones de Reino Unido con Ucrania no son 'transnacionales', sino más bien de 'asociación'", ha concluido Wallace, intentando zanjar así un asunto del que el propio primer ministro británico, Rishi Sunak, llegó a desmarcase.
Por su parte, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, se mostró sorprendido por las declaraciones del ministro de Defensa británico y aseguró que Kiev "siempre" ha estado agradecido por todos los esfuerzos llevados a cabo no solo por Londres, sino por el conjunto de los países aliados.