A todo el mundo le gustaría vivir en una casa amplia, pero lo cierto es que la mayoría de las veces, por precio o por una cuestión de espacio, las viviendas más habituales se reducen a unas pocas decenas de metros. Por ello, hay que tener especial cuidado a la hora de amueblarlas para no perder ni un solo centímetro.
En esta labor hay algunos muebles que nos facilitan un poco la tarea y uno de ellos vuelve a ser tendencia: las mesas nido. Se trata de un conjunto de mesas de diferentes tamaños que encajan unas debajo de otras, permitiendo disponer de una superficie extra cuando hace falta y de ahorrar espacio guardándolas de forma compacta cuando no se están empleando.
Su diseño las hace prácticas y versátiles. Se suelen utilizar en lugares pequeños donde maximizar el espacio es una prioridad, pero también son apreciadas por su funcionalidad y por su estética moderna. Sin duda añaden un elemento decorativo a las estancias y están disponibles en una amplia variedad de estilos, materiales y acabados, lo que permite integrarlas fácilmente en distintos estilos de decoración.
Qué aportan
El diseño de las mesas nido suele ser estilizado y moderno, lo que añade un toque de elegancia y sofisticación a la habitación; dependiendo del material y del acabado, pueden aportar desde un aire minimalista hasta un estilo más lujoso o vintage.
Están disponibles en madera, metal o vidrio, en formas rectangulares, redondas, cuadradas o curvas y en diferentes colores. Esto permite que se adapten perfectamente tanto a entornos modernos como a otros más clásicos o rústicos.
La posibilidad de separar y distribuir las mesas por el espacio permite crear dinamismo en la distribución de los muebles. Es fácil cambiar su disposición, lo que contribuye a un ambiente más flexible y adaptado a las diferentes situaciones.
En ambientes pequeños o minimalistas, las mesas nido son ideales porque permiten tener superficies adicionales sin sobrecargar el espacio visualmente. Cuando no están en uso, pueden guardarse una debajo de la otra, lo que contribuye a dar una apariencia ordenada y despejada.
Además de su función práctica, estas mesas en sí mismas pueden ser un punto focal en la decoración. Por ejemplo, una mesa nido con un diseño llamativo o en un color vibrante puede atraer la atención y complementar la paleta de colores del espacio.
Dónde se colocan
Las mesas nido son versátiles y se adaptan perfectamente a las distintas estancias del hogar. Se pueden tener en la sala de estar, frente al sofá, como mesa de centro, y en el caso de recibir invitados se pueden separar y distribuirse en distintos puntos para apoyar bebidas o platos.
Colocada en el salón a un lado del sofá, junto a una butaca o a una silla de lectura, proporciona una superficie perfecta para colocar una lámpara, una taza de café o un libro.
Si el espacio en el dormitorio es reducido, las mesas nido pueden funcionar como mesitas de noche, ofreciendo varias superficies para lámparas, libros y otros objetos personales.
Ubicadas en la entrada de la vivienda resultan muy útiles para dejar las llaves, el correo o elementos decorativos como plantas o portafotos. Si se necesita más espacio, siempre pueden desplegarse para organizar los objetos.
Si están hechas de materiales adecuados, como madera tratada o metal resistente, pueden utilizarse también en zonas exteriores cubiertas, añadiendo funcionalidad y estilo al espacio.
A continuación te mostramos algunas propuestas.
Sencillez
Pequeñas mesas cuadradas de madera blanca ideales para utilizar juntas o por separado en cualquier lugar de la casa o del exterior donde necesites una mesita auxiliar. Fácil de trasladar y de combinar con otros muebles de la casa. Son de Ikea y su precio es de 17,98 euros.
Dos mesas cuadradas de madera blanca.
Madera y metal
Mesa nido encastrable que consta de tres piezas que combinan a la perfección la autenticidad de la madera con el espíritu moderno del metal. Sus líneas rectas, sencillas y limpias serán foco de atención. Es de Leroy Merlin y su precio es de 99,99 euros.
Mesa rectangular con dos mesas cuadradas debajo.
En círculos
Estas 2 mesas auxiliares son ideales para espacios pequeños, ya que no ocupan mucho sitio y al colocar una debajo de la otra permiten ahorrar mucho espacio. Son muy prácticas para el día a día y su diseño industrial se adapta a todos los estilos de interiores. Son de Maisons du Monde y cuestan 79 euros.
Dos mesitas auxiliares redondas en madera y metal.
Sofisticación
Mesas nido de centro de acero y roble ideales para optimizar el espacio sin sacrificar el estilo. Son de PremiumXL y su precio es de 81,99 euros.
Mesas ovaladas de acero y roble.
Elegancia
Juego de dos mesas nido con estructura de acero angular calibrado lacado y tapa de vidrio. Es de Sidivani y cuesta 667 euros.
Mesas nido cuadradas en acero y vidrio.
Versatilidad
Juego de 4 mesas nido de madera y metal prácticas, estables y sólidas. A la venta en IDMarket al precio de 56,99 euros.
Cuatro mesas nido con tapa de madera y estructura negra de metal.
Rústico
Mesa nido de 3 piezas fabricada en fibrofácil de acabado en madera de color marrón y gris con patas de madera de haya. Es de Habitium y está a la venta al precio de 76,96 euros.
Original mesa nido de estilo rústico compuesta por tres piezas.
Transparencia
Set de 2 mesas para utilizar como auxiliares o de centro fabricadas en cristal curvado templado transparente. Son de RegalDekor y su precio 236 euros.
Mesas nido de cristal curvado.
Curvas
Mesas de madera de fresno y pino perfectas para decorar de manera natural cualquier salón. Cuestan 225 euros y son de The Picorner.
Vistosas mesas nido ideales para una decoración natural.
En resumen, las mesas nido no solo son funcionales, sino que también enriquecen el diseño de interiores al ofrecer versatilidad, estilo y la capacidad de adaptarse a diferentes necesidades decorativas y espaciales.