“El objetivo es cuidar a los que cuidan”

Cuidar a los familiares de las personas dependientes. A los cuidadores. Es la labor que lleva a cabo la Asociación Ascudean de Gasteiz desde el año 2000. Atención psicológica, actividades de ocio, o ayuda para encontrar a una persona formada para atender al familiar.

La organización sin ánimo de lucro gasteiztarra ofrece multitud de proyectos con un único fin: ayudar a las personas que se encargan de sus padres, madres o familiares que necesitan atención constante.

Son ya más de 440 socios. Como explica su coordinadora Vanessa Resa, entre las funciones que desarrolla la organización, que cuenta con el apoyo del Departamento de Igualdad, Justicia y Asuntos Sociales del Gobierno vasco, y el Ayuntamiento de Gasteiz, se encuentran las actividades de ocio para los cuidadores. Y es que como subraya Resa, “están 24h cuidando, y no salen de casa, no tienen ocio”. Es por eso que organizan excursiones, casas rurales... todo para ofrecer un poco de respiro a los socios.

Además, “si no puede acudir porque tiene que cuidar, les ponemos a una persona para que se ocupe de la persona dependiente y ellos puedan descansar”. De esa forma, posibilitan que socialicen y hagan actividades fuera de sus domicilios. Y es que la asociación está integrada por familias que, estando al cuidado de personas en situación de dependencia, tienen problemas y necesidades comunes, que buscan estar con otras personas que compartan y comprendan su situación.

Asimismo, uno de los proyectos de Ascudean, Laguntzabide, “apoya a las familias en situaciones de crisis”. ¿Para qué? “De un día a otro se queda una persona dependiente y qué haces?”, se pregunta Resa. Y es que destaca que los papeles, la burocracia... “tardan, pero tú necesitas mañana mismo una persona en tu domicilio que te ayude”, motivo por el cual Ascudean se encarga de hacer de intermediaria con profesionales y familias.

“Buscamos profesionales, y también les ayudamos con altas, nóminas...”. Además, a través de este proyecto fomentan la inserción laboral, ya que forman a personas en peligro de exclusión social para que puedan realizar labores de cuidado, y al mismo tiempo ayudan a las familias facilitando un profesional que se haga cargo de la persona dependiente.

Apoyo al cuidado

En el caso del programa Etxean zaindu ponen el foco en cuidadores en situación de vulnerabilidad. “Es gente que necesita ocio, relaciones sociales, formación, una persona en el domicilio, ayuda técnica... de todo”.

Como resume Resa, el problema reside en que “la gente al principio no sabe qué hacer, están en una situación de emergencia porque se te ha quedado dependiente de la noche a la mañana, o su situación ha empeorado de repente”. Aunque te pongan ayuda a domicilio en un mes, “¿qué hago hasta ese momento?”, pregunta la coordinadora. Y es que recuerda que “la gente trabaja”, y no puede sostener la situación.

Así lo refrenda Alberto Blanco, socio de la asociación, y cuidador de su padre de 88 años. Y es que sostiene que le da tranquilidad tener el apoyo de la organización en momentos de necesidad. “Tener a alguien que te eche una mano para que te explique los papeleos que no sabes lo que hay que hacer... pedir ayudas, qué grado de dependencia... tener esa tranquilidad es una auténtica gozada”.

“Nos ayuda porque posibilita que podamos salir”. Y es que sostiene que “cuando te tienes que ir unos días te buscan a una persona para que le cuide, y sabes que va a estar en buenas manos”. Ya que son personas formadas, “sabes que va a estar bien cuidado”. Explica que hacen distintos cursos. Por ejemplo, formaciones para saber cómo tratar cuando están con Alzheimer etc. Así las cosas, como zanja Resa, “nos ocupamos de la persona dependiente, pero es cierto que nosotros a quien cuidamos es al cuidador. Es la clave de la asociación”.