El Día Internacional del Orgullo LGTBI, que se celebra este miércoles 28 de junio con motivo del aniversario de los disturbios de Stonewall (Nueva York) de 1969, está marcado en este 2023 por los pactos alcanzados en diferentes ayuntamientos por PP y Vox, tras las elecciones del 28 de mayo, y la campaña electoral de los próximos comicios generales del 23 de julio.
La primera polémica en torno a la celebración del Orgullo se registró el pasado 20 de junio en la localidad valenciana de Náquera, donde gobierna Vox tras pactar una serie de medidas con el PP, entre las que se incluye la retirada de la bandera LGTBI de los edificios institucionales.
Esta decisión llevó a varios vecinos de la localidad a colgar su propia bandera arcoiris en los balcones y a las organizaciones del colectivo que existen en el municipio a convocar una marcha, este miércoles, bajo el lema 'Náquera Orgullosa'.
Ese mismo día, en Torrijos (Toledo) el consistorio, formado íntegramente por concejales de PP y Vox, retiró la bandera arcoiris de la fachada del Ayuntamiento alegando que ya hay una puesta en la Plaza de España de la localidad. Sin embargo, las entidades del colectivo de Torrijos aseguran que siempre ha habido dos banderas.
En Toledo, mientras, se ha celebrado la marcha del Orgullo, este domingo 25 de junio, sin una bandera del colectivo ondeando en el Ayuntamiento, como ha ocurrido en los últimos años, después de que el PP no consiguiera un consenso con Vox sobre este tema, que es su socio de Gobierno en la ciudad.
PRIMERA DECISIÓN DEL PARLAMENT BALEAR
Mismas consecuencias ha tenido el pacto PP-Vox en el Parlament balear, que ahora preside Gabriel Le Senne, de la formación de Santiago Abascal. En la que ha sido la primera decisión de la Mesa del Parlament en esta legislatura, se ha rechazado, con los votos de los 'populares' y Vox, colgar la bandera LGTBI durante el Orgullo, como se venía haciendo desde hace años.
Tampoco lo hará el Ayuntamiento de Madrid, a pesar de que en esta nueva etapa, el equipo del alcalde Jose Luis Martínez Almeida, ya no precisa de Vox para gobernar. El edil ha decidido continuar en la línea de la legislatura anterior y limitar la celebración del Orgullo a iluminar la fuente y el Palacio de Cibeles con los colores del arcoiris.
La formación que dirige Santiago Abascal ha reclamado la retirada de estas banderas en otros municipios en los que no tiene acuerdos de Gobierno y en los que no se ha cumplido su reclamación.
LA 'LONA DEL ODIO'
Además, ha usado la bandera que representa al colectivo LGTBI en una lona colgada en el centro de Madrid, dentro de sus acciones de campaña para el próximo 23J. En ella aparece una mano, con una pulsera de la bandera de España, tirando a la basura los símbolos feminista, comunista, el de la Agenda 2030, o la bandera del arcoiris, bajo el lema 'Decide lo que importa'.
Esta iniciativa, que finalmente ha sido retirada este martes por orden de la Junta Electoral Central, ha sido bautizada por la organizaciones LGTBI como 'la lona del odio' y ha provocado que las entidades convocantes de la marcha del Orgullo en Madrid --COGAM y FELGTBI+-- hayan cambiado el lema que iba a encabezar la manifestación que se celebra el sábado 1 de julio.
"Por nuestros derechos. Por nuestras vidas. ¡Con orgullo!" será el lema que finalmente se lea en la pancarta principal de la marcha en la capital que en un principio iba a estar dedicada a la diversidad de las familias LGTBI.
La de Madrid será una de las últimas manifestaciones en celebrarse de la treintena que la FELGTBI+ ha convocado en ciudades de todo el Estado y que se han ido celebrando desde el pasado 17 de junio.
IDENTIFICACIÓN DE UNA CANTANTE EN MURCIA
Murcia es una de las localidades que se ha adelantado al Día Nacional del Orgullo y convocó sus actos principales el sábado 24 de junio, entre ellos un concierto de la cantante Rocío Saiz que acabó con el arresto de la cantante por parte de un policía, después de que decidiera enseñar sus pechos en el escenario.
Saiz informó del suceso a través de su perfil en redes sociales, donde publicó una reacción a lo ocurrido. "Ojalá no tuviera que escribir esto otra vez. En el 'Pride' de Murcia, en la misma canción de siempre donde me quito la camiseta desde hace 10 años, la policía ha parado el concierto", comienza su relato.
Finalmente acabó su actuación, según ha indicado, "por respeto al público" pero, según ha narrado, al bajar las escaleras, un agente le pidió la documentación. "Coacción de libro. Me he negado, obviamente", continúa la artista, para señalar que el inspector fue a buscarla a la calle "para esposarme" diciéndole que "había incumplido no sé cuántas leyes y que le abriría un atestado policial", todo eso, ha sostenido, a gritos.
Según lo escrito por la cantante, el agente apuntó sus datos personales y le dijo "esto es lo que habéis votado". En el Ayuntamiento de Murcia gobierna el PP con mayoría absoluta, tras el 28 de mayo, mientras que en el Ejecutivo autonómico ha llegado con Vox a un acuerdo de Gobierno.
Finalmente, la Fiscalía de Murcia va a incoar diligencias para investigar los posibles hechos imputables al agente de Policía Local que ordenó paralizar la actuación de Saiz.
LAS ENTIDADES PIDEN NO VOTAR DERECHA
La situación política tras el 28M y la cercanía del 23J se ha visto reflejada también en las campañas que las entidades LGTBI que han lanzado en las últimas semanas campañas pidiendo al colectivo que no vote a la derecha.
La propia FELGTBI ha lanzado una campaña en la que recuerda que el partido presidido por Alberto Núñez Feijóo ha recurrido ante el Tribunal Constitucional leyes como la del matrimonio igualitario. "Es el NO al progreso que demuestran cada vez que han de votar una ley social", apunta la campaña, que insiste en que para "blindar los derechos" de las personas LGTBI "no hay que votar derecha.
"Queremos vivir en libertad y con dignidad. Basta de discursos de señalamiento que generan odio contra el colectivo. Frenemos el gobierno del odio", reclama la FELGTBI+.