A cien días del arranque de la nueva legislatura, uno de sus ejes fundamentales, el Pacto Vasco de Salud sigue a toda máquina y celebrará su segunda reunión el miércoles 9 de octubre en Donostia.
La mesa de diálogo pondrá en común las mil páginas de aportaciones realizadas por los principales agentes sanitarios, políticos y sociales de Euskadi. Así, el consejero Alberto Martínez ha asegurado esta mañana en Bilbao que el grueso de las aportaciones se centran en las políticas de personal y las políticas asistenciales.
Javier Meana, el secretario técnico, gestiona toda la información y propondrá un documento de síntesis con el objetivo de que en marzo de 2025 puedar estar ya el pacto plenamente operativo.
PASAR A LA ACCIÓN
Todos quieren pasar a la acción para dar servicio a una sociedad cada vez más demandante de sanidad. No hay que olvidar que cada día más de 100.000 personas usuarias se relacionan con los y las profesionales del Servicio vasco de Salud, que atiende 22 millones de consultas cada año en un país de poco más de dos millones de habitantes.
La primera reunión, liderada por el lehendakari, Imanol Pradales, se celebró el pasado 5 de septiembre en Bilbao bajo la premisa; ¿Cómo podemos transformar nuestro sistema de salud para que también siga respondiendo en las próximas décadas? Y todos los agentes implicados pidieron más tiempo para poder analizar la amplia radiografía presentada sobre el Servicio Vasco de Salud.
Y es que Martínez ha insistido en que uno de los principales retos que afronta la sanidad vasca, el del envejecimiento.
De hecho, Euskadi tiene la mayor esperanza de vida del mundo, y la menor tasa de mortalidad, mejor incluso que Noruega o Francia. Sin embargo, en 2040 vamos a vivir de media seis años más, pero solo dos o tres con buena salud.
Asimismo, los vascos ganaremos tres años por década pero eso representa altas tasas de dependencia, cronicidad, discapacidad y demencia. Unos desafíos para los que Osakidetza debe prepararse a marchas forzadas.
El consejero en su primera comparecencia pública en el ambulatorio de Repélega
MAS ENFERMEDADES CRÓNICAS Y ENFERMEDADES EMERGENTES
El máximo titular sanitario ha repasado algunos de los datos del informe de situación presentado en septiembre con algunos de los desafíos significativos que afronta el sistema debido a cambios demográficos, el aumento de enfermedades crónicas, la aparición de enfermedades emergentes y la demanda creciente de la sociedad.
De hecho, Martínez ha puesto de relieve que la actividad quirúrgica es similar a la de 2019 y, sin embargo, se han duplicado las pruebas diagnósticas complementarias. "Operamos más o menos lo mismo pero estamos haciendo el doble de escáneres, resonancias o ecografías", ha destacado.
Además, ha puesto el foco en los nuevos retos y oportunidades que suponen la globalización y las nuevas tecnologías que también refuerzan el acceso a los servicios.
Martínez indica que el Departamento de Salud acude con "una actitud abierta" y confía en el talante negociador de los participantes de la segunda reunión del Pacto Vasco de Salud. A ella se sumarán nuevos colectivos como el sindicato ESK, el sindicato de auxiliares de enfermería, el colegio de ópticos, así como un colectivo que agrupa a enfermos mentales y sus familiares.
DIAGNÓSTICO, ESTRATEGIAS Y GOBERNANZA
Martínez ha explicado que el trabajo para lograr el Pacto por la Salud se divide en cuatro fases: diagnóstico, principios, estrategias y gobernanza.
Después de cada fase, el participante que no comparta el documento no estará en las siguientes fases, aunque si el desacuerdo es puntual podrá emitir un voto particular sobre ese punto y seguir en el foro.
Sus previsiones es que sea fácil alcanzar acuerdos en las dos primeras fases y que cada una de ellas se pueda aprobar en un mes -el intervalo entre reuniones de la Mesa- y que las dificultades para el consenso se darán al afrontar la estrategia, donde hay "visiones muy distintas".
Los acuerdos alcanzados serán presentados en la Comisión de Salud del Parlamento Vasco y el trabajo consensuado se dividirá en diferentes partes para poder dar salida a un documento de gran calado.
De hecho, para facilitar las negociaciones y el acuerdo esa fase sobre estrategia se dividirá en seis apartados: Sociedad y demanda ciudadana (cronicidad, salud mental, prevención...); Calidad y seguridad (paliativos, farmacia...); Profesionales (perfiles necesarios, carrera profesional, recursos humanos...); Información; Recursos Materiales; y el sector sanitario en el ámbito económico y tecnológico.
NOTABLES AUSENCIAS
El consejero ha señalado que "respeta" la decisión de ELA de no participar en la mesa del Pacto por la Salud, aunque "no acabo de entenderlo" y ha rechazado la presencia de las plataformas en defensa de la salud pública por ser entes de ámbito municipal que pueden hacer llegar sus propuestas a través de organizaciones asistentes como sindicatos o partidos.
También se ha mostrado en contra de invitar a Vox porque ese partido rechaza el autogobierno y defiende que la competencia de sanidad se centralice.
Hace un mes, el lehendakari, Imanol Pradales, Alberto Martínez, consejero de Salud, y Javier Meana, secretario técnico, encabezaron un encuentro en el que se pusieron encima de la mesa cinco objetivos para conseguir una sanidad "de primera que sea referente en Europa".
Entre ellos, el asegurar el acceso universal a Osakidetza, mejorar la calidad asistencial, conseguir una sostenibilidad en el sistema de salud, buscar la participación ciudadana, y profundizar en la prevención y promoción de la salud.