Elaxar Lersundi, padre de Ekai, joven trans de Ondarroa que hace seis años se quitó la vida, ha afirmado que la reforma de la conocida como 'ley trans', es "un pasito más, pero todavía queda mucho por hacer" en la sociedad, por lo que va "seguir luchando" para "allanar el camino a los que vienen detrás", como pidió su hijo.
El debate y aprobación este jueves de la conocida como 'ley trans', destinada a ofrecer una atención "integral y adecuada" a las personas trans en el ámbito educativo, sanitario y jurídico "en igualdad de condiciones con el resto de la ciudadanía", ha coincidido con el sexto aniversario del suicidio de Ekai Lersundi, que se quitó la vida a los 16 años, cuando permanecía a la espera de un tratamiento hormonal.
Su padre, Elaxar Lersundi ha acudido al Parlamento Vasco para presenciar la votación de la reforma de la Ley de no discriminación por motivos de identidad de género y de reconocimiento de los derechos de las personas transexuales.
En declaraciones a los medios antes de la votación, Elaxar Lersundi ha recordado que "hoy es el sexto aniversario del suicidio de Ekai y no sé si será casualidad o causalidad pero, por fin, se va a aprobar este cachito de ley que es la no discriminación de las personas trans".
MUCHO POR HACER
"Es un pasito más, pero todavía queda mucho por hacer en esta sociedad", ha advertido, para asegurar que no se va a rendir, sino que va a "seguir luchando", y que tiene mucho apoyo, como el de "toda la familia Naizen (Asociación de familias de menores trans)".
Además, ha dicho que "Ekai ya dejó escrito que por él ya no podríamos hacer nada, pero que hiciéramos por los que vienen detrás para allanarles el camino". "Y en eso estamos y seguiremos", ha asegurado Elaxar Lersundi.