Con motivo de Euskaraldia, Artepan une fuerzas de nuevo con otro negocio alavés, como hicera recientemente con la quesería La Leze, para lanzar uno de sus panes efímeros que sólo se podrá comprar en las tiendas Artepan y Mamia hasta el 2 de diciembre.
En esta ocasión, Artepan lanza Euskaraldi Ogia, un pan "que rinde homenaje al euskera, y reivindicar el valor de nuestra lengua, el euskera, y ensalzar el valor de nuestro entorno y los tesoros gastronómicos que nos rodean." elaborado con la masa de su pan Azkoien y zumo de las manzanas de la sidrería Trebiñu, en Askartza.
“A la masa de nuestro pan Azkoien, emblema de la casa, incorporamos el zumo de las manzanas de la sidrería Askartza, en Trebiño” explica Txema Pascual, responsable de Artepan, desde la última panadería inaugurada a la vuelta del verano en el barrio de Zabalgana.
La sidrería Trebiñu, localizada en el pequeño pueblo de Askartza, en Trebiño, comienza su actividad hace ya 17 años, cuando plantó los primeros manzanos y empezó a producir la sidra con los frutos de su propia cosecha. A día de hoy la sidrería cuida con celo más de 2.500 manzanos con los que producen en torno a 10.000 litros de sidra al año.
Debido a la ubicación de esta sidrería y a la climatología a la que se ve expuesta, la sidra cambia todos los años confiriendo a cada cosecha una carácter único y prácticamente irrepetible. Su trabajo es fiel al método tradicional. Con la ayuda de amigos y familiares recogen en octubre las manzanas que prensan después y de las que se obtiene el primer mosto, con el que se ha elaborado este nuevo pan.
“La fructosa del zumo confiere a la masa de Azkoien un aspecto oscuro y un punto dulzón muy característico. Euskaraldi Ogia es un pan artesano elaborado con ingredientes naturales: harina de trigo, zumo de las manzanas de la sidrería Trebiñu, agua, levain, harina ecológica de trigo molturada en molino de piedra, sal, malta y levadura”, explica Pascual.
A punto de cumplir 40 años, la defensa del euskera ha sido uno de los emblemas de Artepan. “Para nosotros el entorno es muy importante, y el euskera forma parte de uno de los tesoros que nos rodean” sostiene Txema Pascual.