A primera hora de esta mañana se ha reunido por tercera vez la Mesa de Crisis del Plan Especial ante el Riesgo de Inundaciones, en la que se ha analizado especialmente la situación del pantano de Ullibarri, que roza el 98% de su capacidad en estos momentos. La previsión de los técnicos es que el pico máximo se alcance esta noche, entre las 20.00 y las 24.00 horas, pero, con las medidas adoptadas y las lluvias que se prevén en las próximas horas, se ha destacado que es prácticamente imposible que el embalse alcance su cota máxima de 546,5 metros, lo que obligaría a desaguar al mismo ritmo que entrase el agua.
El ritmo de desembalse del pantano de Ullibarri se ha fijado en 90 metros cúbicos por segundo, mientras que el caudal de desagüe de Urrunaga se ha rebajado a 30. La suma de los dos conlleva una salida de agua de 120 metros cúbicos por segunda, menor que la de ayer para tratar de evitar los daños en las zonas aledañas al cauce de los ríos. Las previsiones realizadas señalan que la situación va a ir mejorando poco a poco, sobre todo en la cuenca del Zadorra que es la que asume el mayor caudal del desembalse.
La Mesa de Crisis del Plan Especial ante el Riesgo de Inundaciones ha rebajado el nivel de riesgo, que pasa de nivel de emergencia 2 a fase de alerta, ya que se considera que la presión sobre las cuencas irá aflojando poco a poco.
La previsión meteorológica indica que las lluvias continuarán durante todo el día de hoy de forma débil y que pararán a partir de mañana para dar paso a una ventana de buen tiempo de entre siete y diez días. Una previsión que, de cumplirse, permitiría que la presión en los embalses se rebajase de manera considerable al no añadirse más agua procedente de precipitaciones, aunque los caudales se mantendrían aún elevados durante muchos días.