El papa "pasó una noche tranquila" y "está descansando", informó este sábado la sala de prensa de la Santa Sede, en el decimosexto día de ingreso de Francisco en el hospital Gemelli de Roma después de sufrir el viernes una crisis por broncoespasmo que causó un empeoramiento "repentino" de su cuadro respiratorio.
"La noche ha sido tranquila, el Papa está descansado", es el comunicado que ha emitido la Santa Sede a primera hora de la mañana. El Pontífice lleva ingresado desde el 14 de febrero en el Hospital Gemelli de Roma.
A primera hora de la tarde de este pasado viernes el Papa sufría una crisis aislada de broncoespasmos que desembocó en un episodio de vótimos con inhalación y "un empeoramiento repentino de la afección respiratoria".
Los médicos informaron que, tras la crisis, "fue prontamente broncoaspirado" y "comenzó ventilación mecánica no invasiva, con una buena respuesta al intercambio gaseoso".
"El Santo Padre se ha mantenido siempre vigilante y orientado, colaborando en las maniobras terapéuticas", desveló ayer la Santa Sede, que insistió que el pronóstico del Papa "sigue siendo reservado".