Política

"El papel de Sumar en Euskadi es clave porque no hay posibilidad de mayorías absolutas"

El gasteiztarra nacido en 1989 es uno de los más estrechos colaboradores de Yolanda Díaz y logró el único escaño de Sumar en Euskadi en el estreno de esta marca el 23-J
Lander Martínez es diputado electo por Sumar.

Lander Martínez acude a la entrevista recién aterrizado desde Madrid, donde acudió para recoger su acta en el Congreso. Bromea con el hecho de que una nota de agencia le califique de diputado “novato”, dada su amplia trayectoria, sobre todo como secretario general de Podemos Euskadi hasta 2020.

PP y Vox acaban de firmar un acuerdo de coalición en Aragón y ya se ha anunciado que se reformará la Ley de Identidad y Expresión de Género y que se derogará la Ley de Memoria Democrática. ¿Le preocupan los pactos entre estos dos partidos a nivel municipal y autonómico?

Me preocupa lo que ya sabíamos, la tendencia de estos acuerdos a eliminar derechos. Se supone que hacemos política para ampliar los derechos y mejorar la vida de las personas, y vemos cómo las primeras decisiones que toman hacen lo contrario. En Aragón hablaban de derogar la Ley Trans, también la Ley de Memoria, de desproteger el desarrollo del aragonés como lengua... Ya son varios los colectivos que ven vulnerados sus derechos debido a la llegada al poder de la extrema derecha, lo que afecta negativamente a toda la sociedad.

¿Qué vaticinio hace de la investidura para ser el próximo presidente del Gobierno español, dejará Sánchez que Feijóo lo intente primero o él mismo dará el paso?

Lo primero, todo esto depende del rey, en el que será uno de los días en los que tendrá un rol importante. Tendremos que saber si Feijóo se aventura a plantearle al rey que tiene apoyos como para ir a una investidura y por lo que estamos escuchando sí tiene esa intención. En todo caso, todo hace señalar que Feijóo iría a una investidura fallida y que no quedaría otra opción que la de que Pedro Sánchez intentase conformar una mayoría que le permitiese gobernar. Parece que va a ser capaz con una negociación probablemente costosa pero esperanzadora y que llegará a buen cauce.

¿Cómo se logrará que Junts dé su voto a favor a Sánchez?

Aún es pronto para saberlo. Estamos en un momento en el que los partidos se están posicionando, lo que es el primer paso en una negociación. Junts también tiene que tener su propio debate interno, sabemos que tiene dos almas, dos posturas diferenciadas sobre cómo abordar esta cuestión y deben alcanzar un planteamiento definitivo. Es evidente que cuando hay varios partidos de corte soberanista con los que tienes que dialogar de cara a una investidura va a ser difícil evitar la cuestión territorial, más bien lo contrario, será importante abordarla. 

¿Cuál es la aspiración de Sumar de cara a la constitución del Congreso y del Senado el 17 de agosto?

Que el peso que tiene se vea en la mesa, normalmente no suele ser un problema, todos los procesos que he vivido suelen terminar con una visión bastante realista de lo que son las cámaras. Lo importante también será que el bloque progresista tenga una mayoría en esa mesa.

¿Se podría dar la posibilidad de que Junts hiciera una demostración de fuerza y diera la presidencia del Congreso al PP?

Lo veo extraño por una razón principal, que Junts en estos momentos no cumple los requisitos para tener un grupo parlamentario y necesita un pequeño empujoncito de la mesa para poder conformarlo. Hay grupos políticos que están bastante más abiertos a dar ese empujón y otros que menos, y les conviene que no sea el bloque de la derecha quien tenga la mayoría en la mesa.

¿Concurrirá Sumar a las elecciones autonómicas del año que viene en Euskadi?

Obviamente, el espacio de Sumar se tiene que ver representado en las autonómicas vascas. Sumar está en un proceso de construcción posterior a las elecciones generales con una asamblea prevista este año y son muchas las decisiones que hay que tomar. Pero la voluntad de estar en esas elecciones en la forma en que corresponda está clara.

¿Cómo encajará la amplia coalición Elkarrekin en ese espacio?

Las fuerzas políticas que conforman Elkarrekin ya han concurrido a las elecciones generales dentro de Sumar. Por lo tanto, hay un punto base del que partimos todos, que es que el espacio se está transformando, el primer paso ha sido esta coalición para las generales y los próximos pasos vienen con el proceso de organización de Sumar. Ese es el espacio en el que tenemos que trabajar, nos toca dialogar en ese marco y plantear el mejor proyecto para esas elecciones.

Elkarrekin Podemos ha asumido una posición crítica con el Gobierno vasco, por ejemplo con la Ley de Educación. ¿Cambiarán las tornas con Sumar, se volverá a posiciones posibilistas, como cuando acordaron los Presupuestos de la CAV con usted como secretario general de Podemos Euskadi?

Elkarrekin Podemos también ha llegado en esta legislatura a algunos acuerdos con el Gobierno vasco. Es verdad que las de 2016 y 2020 son diferentes porque no había mayoría absoluta y ahora sí. Nos toca decidir una estrategia conjunta en la que sobre todo tenemos que entender que se están dando cambios políticos de profundidad en Euskadi, con un PNV que se debilita en tres elecciones seguidas y el crecimiento de otras formaciones políticas. Tenemos que decidir estratégicamente cuál es el lugar que queremos que juegue en Euskadi nuestro espacio político, que creo que es clave.

¿Por qué?

En Euskadi tampoco existen posibilidades de mayorías absolutas. Por tanto, si se quiere que haya cambios en el Gobierno vasco o en diferentes instituciones, nadie va a poder hacerlo sin pactar con nosotros.

En el pasado se ha especulado con una alianza de izquierdas entre el PSE, EH Bildu y Podemos. ¿Cómo ve esta posibilidad con Sumar ahora en el tablero de juego?

Esto pudo haber sido ya en 2016 y no lo fue, sabemos que el Partido Socialista requiere todavía de tiempo para alcanzar acuerdos con EH Bildu y que tiene una coalición estratégica con el PNV que, a día de hoy, opta por sostener. Pero puede llegar un momento en que entre las dos fuerzas políticas no alcancen las mayorías que alcanzan ahora y ahí el PSE tendrá que renovar su planteamiento estratégico.

¿Y qué papel ejercería su formación política en esa casuística?

Nosotros siempre hemos apostado por gobiernos progresistas, lo hemos hecho en el Estado, Elkarrekin Podemos lo ha hecho en Euskadi cuando ha podido en diferentes municipios, tanto cuando yo dirigía la organización como después. Obviamente, no vamos a evitar las oportunidades que tengamos de conformar gobiernos de izquierdas, vamos a impulsarlas sabiendo que la aritmética en Euskadi es compleja y que cada lugar es un mundo. Ya hemos aprovechado estas oportunidades con buen resultado en Errenteria, Irun, Galdakao...

¿Cree que EH Bildu ha tocado techo a nivel electoral? ¿El PNV tiene margen de recuperación?

Es verdad que EH Bildu todavía tiene limitaciones en su crecimiento porque le quedan pasos que dar en diferentes ámbitos. Veo al PNV muy descolocado, tras tener tantas victorias varias derrotas le han dejado tocado. Pero sobre todo me da la sensación de que sus posiciones se están quedando anticuadas, no son capaces de articular un discurso potente para cuestiones tan importantes como el cambio climático.

Se ha mostrado proclive a encarar el debate sobre el modelo territorial, como ha reivindicado Andoni Ortuzar en el contexto de la negociación para la investidura.

Es que nosotros no tenemos miedo a los debates. Sumar tiene un documento que plasma bastante del pensamiento territorial que ya desarrollamos en su día aquí en Elkarrekin Podemos. Apostamos por un Estado descentralizado, con carácter federal o incluso confederal. Aunque aspiramos a cambiar la Constitución, sabemos que actualmente nos da herramientas tanto de descentralización competencial, como en términos federales y con un planteamiento asimétrico de la configuración del Estado. Ahí hay margen para hacer apuestas territoriales y ningún momento es malo para abordarlas con la sensibilidad y el diálogo que requieren, sin grandes palabras ni ultimátums.

El CIS sobre la tendencia del voto antes del 23-J indica que Sumar estaba al alza en las 48 horas previas a la apertura de los colegios electorales. ¿Cómo valora la campaña realizada?

Se dio una tendencia al alza durante toda la campaña, hay dos o tres días que a Sumar le vienen muy bien, que fueron a partir del debate a tres en el que Yolanda Díaz hizo un gran papel, reconocido por todo el mundo. De hecho, podría decir que se nos hizo hasta corta, tuvimos un muy buen cierre de campaña.

No hay que desdeñar, por tanto, la importancia de una campaña.

Lo que demuestra esto es que cada año que pasa las campañas toman más importancia, cada vez las personas deciden su voto más tarde, y que Sumar fuera capaz de sostener la tensión de campaña, de estar en campaña los 15 días y de tener un buen final ayudó a parar ese gobierno de derechas. No podemos hacer campañas de trámite, si hay un objetivo político hay que ir con todo a tratar de convencer al mayor número de gente posible porque deciden en el último momento. 

Siguiendo con los vaticinios, ¿tendrá Yolanda Díaz en la nueva legislatura una presencia y relevancia equiparable a la anterior?

Creo que eso es evidente y además es inevitable. Ha sido la mejor ministra de Trabajo que hemos tenido en democracia, varias de las grandes reformas que se han hecho en esta legislatura las ha dirigido ella, tenemos a un PSOE que presume de logros de Yolanda Díaz y si las mejores noticias de esta semana en el Estado han sido el descenso del paro ha sido gracias a la reforma laboral. Por lo tanto, creo que es imposible restarle reconocimiento porque si no se lo ganará ella sola.

¿Ve factible un cambio del reglamento del Congreso para permitir el uso de las lenguas cooficiales, como han propuesto?

Es una reivindicación histórica que queremos impulsar. Si creemos en un Estado plurinacional las instituciones que lo representan se tienen que parecer lo más posible a ese país, y cuanto más se parezcan más cerca vamos a estar de la gente. Además, a mí me gustaría mucho hablar en euskera en el Congreso y así lo vamos a intentar.

"Cada partido de la coalición se ha comprometido a respetar la estrategia unitaria de acción"

En el amplio espectro de 15 partidos que integran Sumar, Podemos se hace notar desde su misma formación como el miembro con mayor potencia, pero también el más rebelde e inconformista. Las más de las veces, una piedra en el zapato de Yolanda Díaz, pese a tratarse de uno de sus aliados fundamentales. Dentro de la heterogénea coalición que supone Sumar, ¿es Podemos el Lobezno del grupo?

(Se ríe). Casi es mejor preguntarles a ellos. Es evidente que la negociación con Podemos fue dura pero también finalizó con éxito. Ya sabemos cuál es su estilo, qué papel quieren jugar, pero del mismo modo que otras fuerzas políticas quieren jugar otro papel. Se trata de entender esos papeles y de gestionarlos de la mejor manera para que haya un grupo parlamentario lo más exitoso posible.

Por ejemplo, piden que sus cinco diputados tengan autonomía dentro del grupo parlamentario. ¿Será esto factible?

La autonomía es una palabra que tiene muchas interpretaciones. Cada partido político tiene sus órganos de decisión y derecho a formar sus estrategias, pero cada formación que va a pertenecer a ese grupo también ha firmado un acuerdo en el que se compromete a una estrategia unitaria de acción. Obviamente respetamos la autonomía de los partidos pero ellos también tienen que respetar los compromisos colectivos que han adquirido no solo con Yolanda Díaz sino con el resto de fuerzas políticas que componen la coalición.

También se ha dejado caer que Podemos reclamaría tener presencia en el futuro Consejo de Ministros, si la investidura cae del lado de Sánchez.

Creo que es pronto para hablar de las presencias en el Consejo de Ministros, lo que importa es que en los ministerios que correspondiesen en función de la negociación a la parte de Sumar estén las mejores personas posibles, las que mejor lo vayan a hacer y las que mejor vayan a ayudar a la ciudadanía y a expandir derechos y libertades. Esto no va de cuotas, va de hacerlo lo mejor posible.

En esta reivindicación se ha puesto como ejemplo la labor realizada por la ministra de Igualdad, Irene Montero, que por otro lado no entró en las listas para el pasado 23-J. ¿Qué balance hace de su trayectoria en el ministerio?

Es innegable que han sido muchos los avances que ha habido en materia de feminismo. El Ministerio de Igualdad ha conseguido la Ley Trans, que ha ampliado los derechos sistemáticamente vulnerados de este colectivo y que ha hecho que vivamos en un país mejor, así como cosas que se podían haber hecho un poquito mejor pero que también nos permiten avanzar en derechos. Hay que hacer un balance positivo del trabajo y también saber que los ciclos políticos y las negociaciones son como son y a todo el mundo le tocó ceder, en este caso a Podemos en la figura de Irene Montero.

¿Cree que a Podemos se le pasa por la cabeza formar grupo propio en el Congreso?

No puede, el reglamento impide que miembros de una coalición estén en grupos diferentes. La opción sería ir al Grupo Mixto pero no tiene lógica estratégicamente.

La valoración de los resultados electorales también ha sido divergente; Podemos afirma que ha habido una bajada desde las anteriores generales y Sumar destaca la recuperación respecto a los comicios del 28 de mayo.

Después de las autonómicas y municipales, y forales en el caso de Euskadi, el espacio político quedó tocado perdiendo presencia en instituciones bastante importantes. Hemos recuperado el voto de personas que, por lo que sea, entonces no se movilizaron y eso nos ha permitido conseguir nuestros objetivos políticos. 

07/08/2023