El Parlamento húngaro ha reelegido este lunes a Viktor Orbán como primer ministro del país, un cargo que ocupará por quinta vez en su carrera política.
La votación se ha saldado con 133 votos a favor, 27 en contra y ninguna abstención, según informaciones del diario 'Magyar Hirlap'. El líder del partido Fidesz lleva al frente del Ejecutivo desde 2010 de manera ininterrumpida.
Orbán fue elegido primer ministro del país por vez primera en 1998, un cargo que revalidó posteriormente en 2010, 2014 y 2018. Este lunes, poco después de conocerse el resultado de la votación, el mandatario ha jurado el cargo ante la Cámara.
Así, en el que ha sido el primer discurso del quinto mandato de Orbán, el primer ministro ha dado las gracias a los diputados y ha insistido en que "no olvidará que es la decisión del pueblo" la que lo ha llevado a permanecer en el poder.
"Hemos trabajado por la confianza del electorado", ha aseverado antes de matizar que en 32 años de historia democrática húngara, ningún partido ha recibido tantos apoyos. "Hemos obtenido la mayor confianza incluso cuando la izquierda internacional y los medios de comunicación se han unido contra nosotros. Bruselas también quiere nuestra perdición", ha añadido.
En este sentido, ha aseverado que "esta serie de victorias no tiene precedentes en el mundo occidental", por lo que "es obligatorio buscar un significado más profundo". "Los húngaros tienen un sofisticado sentido del peligro y experiencia histórica, han aprendido que en tiempos de peligro, la guerra civil puede tener graves consecuencias, incluida la pérdida de un país", ha aseverado.
Según Orbán, la principal responsabilidad del primer ministro es "pensar en los tiempos que se avecinan y preparar a los húngaros para ello". "Nunca puedes ser lo suficientemente inteligente estando solo", ha dicho, si bien ha alertado de que Europa se ha introducido en la "era de los peligros".
"Esta década será una era de peligro, inseguridad y guerra. La política de sanciones provocó una crisis energética y la subida de los tipos de interés por parte de Estados Unidos han generado una época de inflación. Todo esto traerá recesión económica y las epidemias amenazantes podrían reaparecer", ha lamentado.
Elecciones de abril
El Fidesz se impuso claramente en las elecciones celebradas el pasado mes de abril. Tras conocer su victoria, Orbán lanzó un mensaje a la UE, muy crítica con sus reformas legislativas, a los "burócratas de Bruselas" y al "imperio Soros". "Grandes centros de poder y organizaciones internacionales han ido en nuestra contra. Ahora pueden decir que cada céntimo que han dado a la izquierda húngara ha sido un desperdicio", afirmó entonces.
La formación de Orbán se impuso así a la coalición opositora Unidos por Hungría, que aglutina a seis formaciones y tenía como abanderado a Peter Marki-Zay en una jornada electoral que se desarrolló con tranquilidad.
Estos datos tiran por tierra las previsiones que apuntaban a una disputa reñida entre Fidesz y la coalición Unidos por Hungría y certifican el rumbo conservador que propone Orbán.