Los parlamentarios vascos han recordado de pie y con un minuto de silencio al dirigente de Herri Batasuna Santiago Brouard, asesinado el 20 de noviembre de 1984 por los GAL.
El pleno ordinario de este jueves ha comenzado con el homenaje a Brouard, cuya fotografía ha permanecido en las pantallas del salón de plenos durante el acto.
Brouard fue asesinado en su consulta de pediatra de Bilbao por dos pistoleros a sueldo de los GAL. Ese año fue elegido parlamentario pero no llegó a ocupar su escaño.
Todos los parlamentarios y consejeros del Gobierno vasco, incluido el lehendakari, Iñigo Urkullu, han tomado parte en este tributo a Brouard y en el exterior de la sede de la Cámara de Gasteiz se ha encendido un pebetero junto a la escultura "Brújula de medianoche", instalada en recuerdo de las víctimas del terrorismo.
El 18 de febrero de 2014 la Mesa del Parlamento acordó llevar a cabo todos los años homenajes a los cuatro parlamentarios vascos asesinados en atentados terroristas durante la sesión plenaria que tenga lugar en fechas cercanas a su muerte.
Los miembros de la Cámara recordados son, además de Brouard, los socialistas Enrique Casas, asesinado el 23 de febrero de 1984 por los Comandos Autónomos Anticapitalistas, y Fernando Buesa, que murió junto con su escolta, Jorge Díez, cuando ETA hizo explotar una furgoneta bomba el 22 de febrero del año 2000.
El cuarto parlamentario vasco fallecido en atentado de ETA es el que fuera también portavoz del PP en el Ayuntamiento de San Sebastián, Gregorio Ordóñez, asesinado en la capital guipuzcoana el 23 de enero de 1995.