Cinco jornadas más y la fase regular de esta Euroliga habrá tocado a su final. Baskonia lleva toda ella, más de medio año, entre los ocho elegidos, pero los últimos resultados cosechados le hacen estar en peligro, por lo que el choque de esta tarde (19 horas) es fundamental. Se visita el Pionir y sus más de ocho mil enfervorizadas gargantas. Y le aguarda el Estrella Roja, ya sin opciones, de viejos conocidos como Dusko Ivanovic y Luca Vildoza.
Es el primero de los dos choques que quedan a domicilio antes de recibir, consecutivamente, a Alba Berlín, Fenerbahçe y Lyon Villeurbanne, y cerrar la liga regular en el Pireo ante Olympiacos. No estaría de más tener ya sellado el pasaporte para estar en el Top8 previamente a emprender rumbo a Atenas.
El 92-75 registrado hace más de cinco meses en el Buesa Arena solo perdura con el paso del tiempo un reflejo de la superioridad habida entonces de los azulgranas sobre los serbios. Nada más. Hoy, en otro templo de la presión ambiental por excelencia, es otra historia. Basta comprobar la paliza endosada al Maccabi en su día y la clara derrota de la pasada semana en Tel-Aviv. Pero ganar también es posible.
Enemigo 'made in' Dusko
Todo apunta a que en Belgrado espera un duelo de similares connotaciones, ante un rival que siempre compite, 'made in' Dusko, quien destaca de su antiguo equipo que es el mejor atacante y asistente, y en el que milita un Vildoza que fue objeto de deseo a comienzos de curso, pero no pudo ser. El argentino forma parte de la élite de la competición en jugadores exteriores, al igual que sus compañeros -también exACB- Facundo Campazzo y Nemanja Nedovic, que arrastra problemas físicos y es duda para el partido, al igual que Ognjen Dobric. Branko Lazic es baja confirmada, lo mismo que Tadas Sedekerskis, única baja una vez más en los baskonistas.
El juego interior de los rojiblancos también es poderoso gracias a piezas como Luka Mitrovic, Filip Petrusev y Benjamin Bentil, que allá por 2018 estuvo en las filas de Bilbao Basket.
Peñarroya considera clave "tener la cabeza fría"
Joan Peñarroya señala que, quedando lo poco que queda, todos los partidos "son trascendentes, finales...no sé. Estamos muy cerca del final y hay que sumar victorias. La primera oportunidad es esta. El ambiente en el Pionir va a ser fantástico. Gran atmósfera, mucho en juego y se puede definir por pequeños detalles".
El coach catalán apostilla que una de las claves pasa por "controlar el partido al ritmo que mejor nos venga, con individualidades muy importantes con mucha energía y mucho corazón. Tenemos que tener la cabeza fría para agarrarnos al partido".
El Zalgiris, gran rival de Baskonia ahora mismo por ocupar la octava plaza de la clasificación, juega en Estambul frente al Fenerbahçe, y el martes recibe en Kaunas al Mónaco. Aparentemente un calendario a corto plazo más complejo que el de la escuadra gasteiztarra.