El Tribunal Regional de Rzeszów (Polonia) ha decretado prisión provisional para el periodista vasco Pablo González, situación en la que permanecerá hasta el próximo 29 de mayo, acusado de un delito de espionaje para Rusia.
Así lo ha indicado a Efe la mujer de González, Ohiana Goiriena, quien no ha podido contactar con su marido desde que fue detenido a finales de febrero, y el 3 de marzo el Tribunal decretó la prisión provisional por un periodo de tres meses hasta la celebración del juicio.
Goiriena ha añadido este miércoles que solo habla con su marido el cónsul español en Varsovia, quien ha comunicado a la familia que se encuentra bien física y anímicamente y que se ha declarado inocente de las acusaciones de espionaje.
"Estábamos preocupados al principio; ahora estamos enfadados y con rabia por la impotencia de no poder hacer nada", ha lamentado Goiriena, quien ha reclamado al Gobierno español que "llame la atención" a Polonia por la situación de Pablo González, que su familia "no entiende".
Pablo González, nacido en Rusia y que reside en Gernika con su esposa y sus tres hijos, fue detenido en Polonia, a pocos kilómetros de la frontera con Ucrania , acusado de ser un agente de la Dirección de Inteligencia de las Fuerzas Armadas rusas, cuando trabajaba como 'freelance' informando sobre la llegada de los refugiados que huyen de la guerra.