Peugeot se ha convertido en uno de los paladines de la electromovilidad. Mientras algunos constructores ponen más empeño en proclamarse pioneros en la comercialización de coches eléctricos que en situar estos al alcance del público, la firma del león acelera la transición energética de su gama. Para el año que viene todos sus modelos van a disponer al menos de una variante total o parcialmente electrificada. Seguirán el ejemplo del e-208, la declinación a batería incluida desde el principio en la actual generación del modelo. Ahora, la marca francesa enriquece el catálogo de esta propuesta ‘cero emisiones’ incorporando una segunda versión, la e-208 GT, que aumenta su potencia a 156 CV y su alcance hasta 400 km. La ofrece desde 38.170 euros en adelante.
La nueva alternativa incrementa un 15% el rendimiento y un 10,5% la autonomía de la única variante a batería disponible hasta el momento. Puede parecer un progreso moderado, pero resulta determinante, puesto que sitúa al e-208 en condiciones de brindar dos enfoques de la electrificación distintos y, al tiempo, complementarios: uno más urbano y otro más viajero. Gracias al plus de energía, que aumenta de 136 a 156 CV, y a la mayor capacidad de su batería (51 kWh), esta segunda entrega del modelo mejora sus prestaciones y extiende su radio de acción para acercarse al gran público.
El Peugeot e-208 va más lejos
ÁGIL Y RENTABLE
Esas facultades se traducen en un comportamiento más ágil y en una mayor autonomía: acredita un alcance máximo oficial de 400 km. Y lo que es más importante, la nueva declinación del e-208 certifica un grado de eficiencia energética mejor que el de casi todos sus rivales, al reducir el promedio de consumo a 12 kWh cada 100 km.
Dicha cualidad propicia añadir a su casi nulo impacto medioambiental una interesante rentabilidad. Depara costes de utilización menores que otros eléctricos y, por supuesto, claramente inferiores a los que comporta un modelo con motorización térmica convencional. Eso sí, para disfrutar plenamente de todas las ventajas inherentes a este y a cualquier coche a batería, conviene tener asegurado el acceso a una toma eléctrica; de este modo se puede reponer energía aprovechando las tarifas más ventajosas y los tiempos muertos en los cuales no se precisa el vehículo (horas de sueño o jornada laboral).
El Peugeot e-208 va más lejos
LISTO PARA VIAJAR
Si la primera versión del compacto eléctrico de Peugeot ya satisfacía las necesidades cotidianas de la mayoría de automovilistas -el recorrido medio diario de un coche ronda hoy los 50 km-, la nueva derivada permite afrontarlas con más holgura y alegría, si cabe. La teoría señala que una sola carga de batería cubre los desplazamientos urbanos e interurbanos semanales de cualquier usuario; sin humos y por poco dinero. La realidad confirma esta posibilidad, e incluso la de afrontar con plenas garantías viajes de media distancia. Por ejemplo, un exigente trayecto de ida y vuelta entre Bilbao y Donostia en circunstancias normales.
El e-208 está en perfectas condiciones de asumir ese tipo de retos. En el caso concreto de la nueva variante GT de 156 CV, lo logra sin necesidad de practicar una conducción especialmente sosegada encaminada a prolongar la duración de la carga de la batería. Eso significa circular libremente, utilizando la climatización si es preciso y a un ritmo semejante al acostumbrado en un vehículo con motor de combustión.
Este Peugeot eléctrico se puede reabastecer en un enchufe doméstico, en un punto de carga monofásica de 7,4 kW (en 8 horas), en uno trifásico de 11 kW (en 5 horas y cuarto) o en un cargador rápido de hasta 100 kW (repone el 80% en media hora). La versión más solvente incluye el cargador OBC de 11 kW trifásico y va provista de un cable trifásico Modo 3 de 22 kW, lo que permite acelerar las operaciones de suministro. De este modo consigue reabastecer su acumulador en 25 minutos en un punto público de 100 kW o en una electrolinera.
El e-208 propone una conducción ‘a la carta’. Su menú da a elegir tres modalidades de respuesta que se adaptan tanto a las circunstancias de la vía como a las preferencias o el estado de ánimo de quien conduce. El modo ‘Eco’ prioriza la autonomía, el ‘Sport’ fomenta el dinamismo y el ‘Normal’ persigue el confort.
El Peugeot e-208 va más lejos
TECNOLOGÍA AVANZADA
El constructor francés dota a su modelo de modernas tecnologías de asistencia a la conducción, que pueden gestionarse desde el singular puesto de mandos i-Cockpit, con cuadro de instrumentos 3D elevado. Lo pertrecha de control de crucero adaptativo con función Stop&Go y distancia de seguridad regulable, mantenimiento de la posición del vehículo en la vía, control de ángulo muerto, sistema de frenado automático de emergencia con capacidad para detectar peatones y ciclistas (funciona noche y día, hasta 140 km/h), además de alerta activa de cambio involuntario de carril con corrección de trayectoria (activo desde 65 km/h).
El equipamiento de serie de la interpretación e-208 GT contempla faros delanteros Full LED con cambio automático a luces de carretera, acceso y arranque manos libres, pilotos traseros Full LED 3D con firma lumínica de las tres garras, llantas de aleación de 17 pulgadas, parrilla específica, pedales de aluminio, umbrales de puerta en acero inoxidable y un exclusivo volante de cuero perforado con el logo GT.