La progresiva recuperación de la actividad tras las restricciones por la pandemia llevó a la economía del Estado a registrar en 2021 un crecimiento del PIB del 5%, su mayor avance anual desde el año 2000, tras anotarse en el último cuarto del año un repunte trimestral del 2%, seis décimas menos que en el trimestre anterior, según el avance de datos de Contabilidad Nacional publicado este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
De este modo, la economía española regresó en 2021 a tasas positivas anuales después de que la irrupción del coronavirus provocara en 2020 un descenso histórico del PIB del 10,8%.
El avance del PIB del 5% registrado en 2021, pese a ser el más pronunciado en 21 años, se ha quedado 1,5 puntos por debajo de la previsión de crecimiento del Gobierno para dicho ejercicio y está por encima de las proyecciones de algunos organismos como el FMI (4,9%), el panel de Funcas (4,8%) ó la OCDE (4,5%). El dato también ha mejorado las previsiones del Banco de España (4,5%), aunque éstas se hicieron antes de las revisiones al alza del INE del segundo y el tercer trimestre.
La demanda nacional aportó 4,6 puntos al PIB en 2021, cifra 13,2 puntos superior a la de 2020, mientras que la demanda externa contribuyó con 0,4 puntos, 2,6 puntos por encima del ejercicio anterior.
A precios corrientes, el PIB de 2021 se situó en 1.202.994 millones de euros, un 7,2% más que en 2020. En el cuarto trimestre, el PIB a precios corrientes alcanzó los 319.030 millones de euros, superando los niveles previos a la pandemia (315.023 millones de euros en el cuarto trimestre de 2019).
EL CONSUMO DE LOS HOGARES SE DISPARA
Según los datos de Estadística, el consumo de los hogares registró en 2021 un crecimiento del 4,7%, su mayor avance anual desde 1999, mientras que el gasto público aumentó a un ritmo del 3%, tres décimas menos que en 2020. Con el repunte de 2021, ya son siete años consecutivos de crecimientos del gasto público.
Por su parte, la inversión retornó a tasas positivas el año pasado al crecer un 4,1%, en contraste con el desplome del 9,5% que experimentó en el primer año de pandemia, el de 2020.
Por sectores económicos, los servicios lideraron el crecimiento en 2021, con un aumento de su valor añadido bruto del 5,9%, seguidos de cerca por la industria, con un alza del 5,3%. En cambio, construcción y agricultura registraron descensos del 4,1% y del 5,5%, respectivamente.
EL CRECIMIENTO TRIMESTRAL SE MODERA AL 2%
En la recta final de 2021, el PIB creció un 2%, seis décimas menos de lo que lo hizo en el tercer trimestre. Con este repunte trimestral, se acumulan tres trimestres consecutivos de tasas positivas.
El consumo de los hogares disminuyó un 1,2% entre octubre y diciembre tras dos trimestres al alza, mientras que el gasto público se contrajo un 0,4%, su mayor descenso trimestral desde el segundo trimestre de 2014. La inversión, por el contrario, avanzó un 4,9% en el cuarto trimestre, 3,7 puntos por encima del trimestre anterior y su mayor repunte desde el tercer trimestre de 2020.
Todos los sectores crecieron entre octubre y diciembre de 2021, aunque sólo la agricultura registró un dato mejor al del tercer trimestre, con un avance del 9% tras trimestres de tasas negativas. La industria, por su parte, mantuvo su ritmo de avance en el 2%, mientras que la construcción moderó cuatro décimas su crecimiento, hasta el 1,6%. La desaceleración fue aún mayor en los servicios, que pasaron de progresar un 4,1% en el tercer trimestre a hacerlo un 1,8% en el cuarto.
Igualmente, las exportaciones mostraron en el cuarto trimestre peores datos que en el tercero, aunque las importaciones sí que los mejoraron. Las primeras crecieron un 6,5%, frente al aumento del 7,1% del trimestre anterior, en tanto que las importaciones aceleraron su crecimiento más de un punto, hasta el 3,5%.
EL PIB ACELERA SU AVANCE INTERANUAL HASTA EL 5,2%
En tasa interanual, el PIB del cuarto trimestre creció un 5,2%, casi dos puntos por encima del trimestre precedente (3,4%), gracias a una mayor aportación de la demanda nacional y de la demanda externa.
En concreto, la contribución de la demanda nacional al crecimiento del PIB interanual fue de 3,6 puntos, 1,1 puntos más que en el tercer trimestre, en tanto que la demanda externa contribuyó con 1,7 puntos, ocho décimas más.
El consumo de los hogares moderó su crecimiento interanual tres décimas en el cuarto trimestre de 2021, hasta el 2,4%, mientras que el gasto público frenó su avance casi dos puntos, hasta el 1,3%, su menor aumento desde el tercer trimestre de 2017. La inversión, por contra, pisó el acelerador y subió un 3,7%, en contraste con el retroceso del 0,6% del trimestre anterior.
Las exportaciones registraron un incremento interanual en el cuarto trimestre del 15,8%, un punto por encima del trimestre anterior, en tanto que las importaciones desaceleraron su ritmo de avance hasta el 11,1%, frente al 12,2% del tercer trimestre.
El PIB a precios corrientes aumentó un 9,9% en tasa interanual en el último cuarto del año. Con ello, el deflactor implícito del PIB subió un 4,4% respecto al cuarto trimestre de 2020, lo que supone 2,8 puntos más que en el trimestre anterior.
1,1 MILLONES DE EMPLEOS MÁS EN EL ÚLTIMO AÑO
El empleo de la economía, en términos de horas trabajadas, aumentó un 0,2% en el cuarto trimestre respecto al trimestre anterior, una décima menos. Esta tasa es de mayor magnitud en el caso de los puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo (del 1,3%, lo que supone 2,6 puntos menos que en el tercer trimestre) debido al descenso de la jornadas medias a tiempo completo (-1,2%).
En términos interanuales, las horas trabajadas aumentaron un 2,9%, tasa cuatro décimas inferior a la del tercer trimestre. Por su parte, los puestos equivalentes a tiempo completo se incrementaron un 6,4%, dos décima más, lo que supone que en un año se han creado 1.121.000 puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo.
La productividad por puesto de trabajo equivalente a tiempo completo registró un retroceso interanual del 1,1%, mientras que la productividad aparente por hora efectivamente trabajada avanzó un 2,2%.
El crecimiento interanual del coste laboral por unidad de producto (CLU) se situó en el 1,4%, tasa tres puntos inferior a la variación experimentada por el deflactor implícito de la economía (+4,4%).
Por su parte, la remuneración de los asalariados se incrementó un 6,8% interanual en el cuarto trimestre, dos décimas más que en el tercero, tras aumentar el número de asalariados un 6,5%, una décima más, y subir la remuneración media por asalariado un 0,3% (-0,3% en el trimestre anterior). Al mismo tiempo, el excedente bruto de explotación creció un 13,3% interanual, 13 puntos más que en el tercer trimestre.