El plante de Isabel Díaz Ayuso a Pedro Sánchez mantiene encendida la hipérbole dialéctica de los dos grandes partidos en un pulso donde el Gobierno español tacha de “absentismo laboral” que la presidenta de la Comunidad de Madrid no acuda a La Moncloa, mientras que desde el PP, Alberto Núñez Feijóo, salió en defensa de la lideresa pero sin mayor argumentario que decir que “todo está explicado y la gente lo ha entendido”. La portavoz del Ejecutivo español, Pilar Alegría, cargó contra Ayuso por “no cumplir su responsabilidad” y aseguró que lo hace por “capricho” e interés personal, pese a que su cargo “obliga a atender las necesidades de todos los ciudadanos, los que te han votado y los que no”. “Y cuando la señora Ayuso decide no asistir a esta reunión, yo me atrevería a decir que es un claro ejemplo de absentismo laboral, que es faltar a tu trabajo”, indicó la dirigente socialista, quien colocó en el otro lado de la balanza la posición de los presidentes autonómicos del PP que sí se han visto con el líder del PSOE “alcanzando acuerdos beneficiosos”, casos de Aragón o la Comunidad Valenciana.
El Gobierno del Estado entiende que la decisión de Ayuso de plantar a Sánchez supone “un varapalo” al liderazgo “ya menguante” de Feijóo, quien públicamente manifestó que era partidario de que los presidentes autonómicos se reuniesen en Moncloa con Sánchez si este les convocaba y que no acudir era “un error”. Fuentes del Ejecutivo defienden que la situación de Ayuso ahora y la de Sánchez en 2016 no son equiparables porque entonces esa reunión con Mariano Rajoy a la que el líder socialista decidió no acudir se produjo en el contexto de una posible investidura.
Desde Génova son conscientes de que la postura de la presidenta madrileña no ha gustado a más de un barón del PP pese a que todos han plegado velas en su defensa. Ni siquiera al propio Feijóo, que tiene que desdecirse ahora de lo que señaló el pasado 7 de septiembre. “No podemos explicarlo más veces ni mejor” fue lo máximo que acertó a precisar ayer ante la cascada de preguntas de la prensa, añadiendo un escueto “¡cómo no voy a respaldar a Ayuso!. Por supuesto”. Es más, agregó que “cuando no hay noticias hay que inventarlas”. Ayuso le telefoneó el pasado domingo para comunicarle que no iría este viernes a la cumbre con Sánchez y su jefe de filas le trasladó su “compresión” con sus “motivaciones” después de que desde el Gobierno la hayan llamado “corrupta” y “delincuente” a su pareja, sostienen fuentes populares. En Génova creen que “todo se ha recrudecido en los últimos días tras la imputación del fiscal general del Estado”, Álvaro García, por revelación de secretos en el caso de la pareja de Ayuso, a quien desde el Gobierno se le califica como “delincuente confeso”.
Desde Madrid, en unas jornadas patrocinadas por Atresmedia, también se pronunció el lehendakari Imanol Pradales, quien defendió la necesidad de acudir cuando se recibe una llamada de Moncloa, aunque sea para “hablar de las discrepancias a la cara”. El líder nacionalista alabó las virtudes del diálogo: “es mejor hablar las discrepancias a la cara, desde el diálogo se construyen las posiciones comunes, desde el diálogo de sordos solo se construye tensión”. “Si a uno le llaman de Moncloa lo oportuno es acudir porque cuando uno dialoga puede defender apropiadamente sus intereses. Yo, siempre que me llamen, acudiré”, zanjó.