El PNV busca la movilización con el “voto del orgullo” por lo construido

Antes de sufrir un ataque con espray de pimienta en plena calle en Barakaldo, Imanol Pradales había protagonizado un mitin de campaña en la Herriko Plaza. En la recta final de la campaña para las elecciones del domingo, el PNV volvió a reivindicar las instituciones y los servicios públicos que se han construido en las últimas cuatro décadas con un liderazgo prácticamente ininterrumpido de los jeltzales. Pero lo hizo añadiendo un matiz: fue directo a la fibra sensible y apeló al “orgullo” de la ciudadanía, los profesionales y los agentes de todo tipo que han levantado los cimientos de Euskadi con un sacrificio que podría echarse a perder si se produce un cambio político de consecuencias inciertas. Y, más allá de esa idea, el PNV apeló al orgullo frente a los mensajes de la oposición, que estaría menospreciando ese esfuerzo colectivo, por ejemplo, cuando opina que Osakidetza se ha sumido en un estado de degradación. El PNV sale en defensa de lo construido frente a los mensajes que pretenden erosionar al Gobierno vasco pero que, por extensión, desprestigian lo construido.

En un mitin en Barakaldo, una de las plazas tradicionales del PNV para movilizar el voto de Ezkerraldea y Meatzaldea, el candidato a lehendakari, Imanol Pradales, apeló al voto del orgullo acompañado por el presidente del EBB, Andoni Ortuzar, y el lehendakari Urkullu, quienes coincidieron en destacar la calidad de vida y las cifras alcanzadas sin ocultar el margen de mejora que existe.

“A la gente hay que preguntarle: con el PNV, ¿Euskadi ha ido a mejor o a peor estos años? ¿Tu vida personal y la de tu familia han ido a mejor o a peor? ¿Tu calidad de vida en Euskadi es buena o no? ¿Qué han aportado los demás? Y si la respuesta es que Euskadi ha ido a mejor y tu vida ha ido a mejor, lo tienes claro: ¡Vota PNV! Cuidado con quien nos invita ahora a cambiar a ciegas la casa que hemos construido con tanto esfuerzo y sacrificio entre todas y todos. Su anuncio inmobiliario es que su vivienda es amplia y con buenas vistas, pero no dice más. No adjunta ni una fotografía. Es normal que lo pinten así de bonito cuando se han pasado años tratando de destruir la casa que hemos construido. ¿Cambiaríais vuestra casa sin haber visto la otra? No, ¿verdad? Cuidado con los radicales cambios a ciegas, no vaya a ser que luego nos llevemos una sorpresa desagradable y no haya vuelta atrás. Por eso, hoy apelo al voto del orgullo. Ese voto del orgullo que sentimos por la Euskadi que hemos construido quienes hemos sudado la camiseta. Votar al PNV es votar por el orgullo del país que tenemos y por seguir mejorando nuestra única casa, Euskadi”, dijo Pradales, para añadir que él está “orgulloso de Euskadi y de ser vasco”. El candidato lanzó su mensaje en un mitin abarrotado que fue amenizado por dos actores en clave de humor.

Presión fiscal

En pleno empate con EH Bildu y cuando algunas encuestas dan la victoria a la coalición abertzale, el PNV cree que la ciudadanía se sigue fiando de los jeltzales porque el balance es positivo a pesar de los errores que se hayan podido cometer. Y lo que está en juego no sería una amenaza fantasma y etérea. Frente a las inversiones que plantea el PNV, Pradales contrapuso el enredo de EH Bildu con la fiscalidad y su cuestionamiento de la deducción por compra de vivienda. “Presión fiscal o inversión fiscal. Dicho de otro modo, hay quien quiere meterle la mano en el bolsillo a las clases trabajadoras y medias de Euskadi. A quienes se esfuerzan, trabajan y se sacrifican todos los días. Por eso, quedarse en casa el domingo puede salir muy caro”, avisó. Sobre las ayudas sociales, apostó por dar ese sustento a las personas para que nadie se quede atrás, pero avisó de que no permitirá que haya “aprobetxategis”, de ahí la propuesta de crear una Agencia de Prestaciones para afinar el control.

Otxandiano y ETA

El mitin llegó en una jornada marcada por las declaraciones del candidato de EH Bildu, Pello Otxandiano, quien hizo equilibrios para no referirse a ETA como un grupo terrorista en la cadena Ser. Urkullu se preguntó “si este es el cambio de ciclo que promueve EH Bildu”, lo que provocó un largo aplauso. “ETA fue terrorismo, lo que hizo fue injusto y causó un daño injusto a miles de víctimas y a la sociedad vasca. Todas las víctimas merecen respeto y reconocimiento. Es el mínimo ético. Decimos a todas las víctimas: vuestro sufrimiento fue injusto y no permitiremos que se olvide”, dijo, para recordar a las 853 personas asesinadas y a los miles de secuestrados, heridos y amenazados.

Ortuzar reivindicó el programa del PNV y su “hoja de servicios”. “¡Claro que todo es mejorable y perfeccionable en la vida! Pero la Euskadi de hoy es una Euskadi que merece la pena. Salimos muy bien en las comparaciones, no ya con el Estado español, sino con Europa”, sostuvo, para poner en valor que el 40% de la economía es industria y servicios avanzados.