El PNV ha sopesado la situación durante unos días consultando con expertos y ha tomado finalmente una decisión: votará a favor de la toma en consideración de la propuesta del PSOE para reformar la ley del solo sí es sí. Tras un análisis de tres días con voces especializadas en la materia, el PNV ha llegado a la conclusión de que esta propuesta es válida y reúne las condiciones mínimas que había puesto sobre la mesa para admitir su tramitación. Cree que se mantiene el tipo penal único de la agresión sexual, de manera que toda relación sin consentimiento será considerada como una agresión sexual; y además se pone límite a la discrecionalidad de los jueces a la hora de aplicar esta ley porque se fijan horquillas con diferentes años de condena. El PSOE calcula que las penas volverán a ser uno o dos años superiores a las actuales en los casos de violencia e intimidación, y se evitarán las revisiones a la baja.
Este anuncio no significa una adhesión total a esta ley ni significa que los socialistas tengan asegurado su respaldo en la votación final. De hecho, los jeltzales propondrán una enmienda para introducir en el artículo 2 del Código Penal un régimen que aporte claridad en todas las leyes que modifiquen los tipos penales, sin necesidad de que en cada una de esas leyes aparezca una disposición transitoria. Este es el origen de la polémica para el PNV. Los jeltzales creen que la ausencia de una disposición transitoria en la Ley de Libertad Sexual, conocida como la ley del solo sí es sí, es la que ha dado pábulo a que los jueces realicen interpretaciones de las condenas a la baja y se haya puesto en libertad a una veintena de agresores sexuales, cuando esa no era la voluntad del poder legislativo. Pero el PNV toma la decisión de permitir la tramitación de la propuesta del PSOE para abrir el melón, como pista de aterrizaje para poder concretar los términos exactos en la fase de enmiendas.
El movimiento del PNV proporciona un balón de oxígeno de los socialistas en la pugna que mantienen con Unidas Podemos dentro del Consejo de Ministros. La batalla se desató ante la negativa a cambiar la ley por parte de la ministra de Igualdad, Irene Montero, y la decisión del PSOE de presentar una proposición de ley por su cuenta. El PNV ha seguido sus propios tiempos consultando con expertos y sin dar una respuesta el primer día, pero finalmente sus ritmos han dado como resultado que el suyo ha sido el primer respaldo de calado que ha recibido el PSOE. Los socialistas estaban especulando ya con la posibilidad de recurrir a la bala del PP. Aunque el resultado final de este posicionamiento sea que el PSOE obtiene un respaldo que le fortalece, el PNV sigue pensando que ambos socios de gobierno, socialistas y morados, deben llegar a un acuerdo.
Se da la circunstancia de que el PNV defiende que la propuesta socialista mantiene el consentimiento, cuestión clave para Unidas Podemos y para la ministra Montero, porque ese factor constituyó un cambio de paradigma dentro de la ley. En concreto, la gran novedad de la ley consistió en equiparar los delitos de abuso y agresión sexual para que ninguna otra víctima tuviera que sufrir el calvario que experimentó la joven asaltada por La Manada. Es decir, basta con dejar claro que no hubo consentimiento, sin entrar en disquisiciones sobre el nivel de resistencia de la agredida o la violencia del agresor, disquisiciones que de algún modo trasladaban la culpa a la víctima como si no hubiera opuesto la suficiente beligerancia.
La propuesta del PSOE añade subtipos dentro del delito, dependiendo de que haya violencia o no, o que se produzca penetración y concurran otra serie de agravantes, pero se parte del principio general de que toda relación sin consentimiento es agresión. En cualquier caso, esta propuesta se aplicará a los nuevos delitos que se cometan a futuro, después de la entrada en vigor de la ley, de manera que probablemente se van a seguir produciendo excarcelaciones.
El portavoz del PNV en el Congreso de los Diputados, Aitor Esteban, anunció su apoyo a la tramitación de la propuesta socialista en el programa En Jake de ETB-2. Tras aclarar que el PSOE no había llamado al PNV, anunció que su partido ha decidido apoyar la tramitación tras cotejarlo con expertos. Se mostró contrariado por que la ministra Montero siga sosteniendo que no hay ningún error en no haber incluido una disposición transitoria en la ley.
Esteban atribuyó esta controversia a la ausencia de una disposición transitoria en la norma que pueda aclarar los términos de su aplicación, de ahí que, al menos, el PNV otorgue cierto valor a que la propuesta del PSOE fije otras horquillas. Añadió que la propuesta socialista también puede ser “válida” porque el “consentimiento se mantiene” según los expertos, y el tipo sigue siendo uno solo, el de agresión sexual. Esteban sí quiso aclarar que, aunque cambie la ley, se van a seguir produciendo excarcelaciones en los delitos ya cometidos.
LA PROPUESTA JELTZALE
En el caso de que la proposición de ley socialista consiga reunir los votos necesarios para superar la admisión a trámite, el PNV registrará una enmienda para “introducir en el corazón del Código Penal y de forma estructural” la transitoriedad, para que “exista un criterio definido” para aplicar las leyes. ¿Qué quiere decir? El solo sí es sí ha desatado un debate sobre cómo aplicar las leyes que cambien delitos que aparecen en el Código Penal. Existe ahora una corriente que dice que cada ley debería incluir una disposición transitoria. Pero la Fiscalía General del Estado aseguró que basta con recurrir a la que recoge el Código Penal de 1995, según el cual cuando la pena “sea también imponible” en virtud de la nueva ley y dentro de su nueva horquilla, no tiene por qué revisarse a la baja.
El PNV propone poner fin a este debate y a este margen para la interpretación. Pide añadir un criterio general en el artículo 2 del propio Código Penal, y no de la ley del solo sí es sí. Según las fuentes consultadas, propone actuar sobre el artículo 2 del Código Penal que se refiere a cuestiones como la retroactividad de las leyes, para que no vuelva a suceder con ninguna otra ley lo que ha sucedido con la normativa de libertad sexual. Apuesta por aportar seguridad jurídica y que no quede al criterio de cada juez.
Esteban lanzó un mensaje para el PSOE y Unidas Podemos, a los que pidió “hablar, entenderse, y mover después lo que haya que mover”. “Es una vergüenza y no ayuda a nada que las partes del Gobierno se ataquen a través de los medios”, sentenció.