El Gobierno español echa tierra sobre el escándalo del espionaje a políticos soberanistas y a miembros de su propio gabinete y no tiene intención de realizar cambios legales para evitar que vuelva a suceder. El ministro Félix Bolaños da por "cumplidos" todos los compromisos asumidos para esclarecer las vigilancias con el programa Pegasus, aunque con ello se refiere a la redacción de informes internos o la comparecencia de la directora de los servicios de inteligencia en la comisión de secretos oficiales, es decir, se refiere al esclarecimiento de los hechos y a una rendición de cuentas a los grupos parlamentarios que, de todos modos, tampoco satisfizo plenamente a nadie. Pero renuncia a que este caso tenga consecuencias, ya que no pondrá en marcha la parte resolutiva, los cambios legales, una actuación que prometió el propio presidente Sánchez en persona: reformar la Ley del Control Judicial del CNI "en la línea de las recomendaciones del Defensor del Pueblo". El portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, ha llevado este asunto al pleno de este miércoles a través de una pregunta al ministro Félix Bolaños, para que le explicara por qué esa reforma no aparece en el Plan Anual Normativo para 2023, el último año de la legislatura. "¿El presidente se ha olvidado? ¿No se atreven? ¿Han cambiado de opinión?", preguntó.
Bolaños no llegó a contestar a la pregunta ni tampoco confirmó ni desmintió que se vaya a dejar para otra legislatura la reforma de los secretos oficiales, pero de manera indirecta sí dio carpetazo al asunto al asegurar que "todos los compromisos están cumplidos". Sus dos intervenciones estuvieron repletas de evasivas y alusiones a otros temas al margen de la pregunta, como las últimas declaraciones de Vox o el control del PP sobre determinados jueces.
Esteban llevó al Congreso la desaparición de la reforma del CNI del plan normativo, tal y como informó este periódico. El plan recoge las leyes y decretos que quiere aprobar Sánchez en el último año que le queda a la legislatura. Esteban preguntó a Bolaños si ha dado carpetazo al escándalo del espionaje a ministros y autoridades catalanas, le recordó que el 26 de mayo el propio Sánchez se comprometió en el Congreso a la reforma de la ley del CNI para reforzar las garantías de ese control y asegurar el respeto a los derechos políticos e individuales de las personas, y le reprochó que el PSOE votara en contra de una proposición de ley del PNV en ese sentido el 13 de diciembre con el argumento de que la iniciativa debía partir del Gobierno español, cuando en realidad tampoco aparece ahora en el plan para 2023.
Bolaños comenzó con un circunloquio sobre las últimas declaraciones de Vox, y después respondió que, cuando el Gobierno conoció la información periodística sobre el espionaje, se comprometió con unas actuaciones y "se llevaron a cabo todas": el control interno del CNI, el informe del defensor del pueblo, "se ha colaborado con la justicia", y se constituyó la comisión de secretos oficiales para que la directora de los servicios de espionaje diera cuenta de lo sucedido. "Todos esos compromisos están cumplidos para esclarecer los hechos", zanjó. Pero en ningún momento se refirió a la reforma del CNI, una pregunta que no llegó ni llegaría a contestar en sus dos intervenciones.
Tampoco los secretos oficiales
Esteban le dio la réplica preguntando si el Gobierno "va a presentar, sí o no, una reforma". Argumentó que no existe un control real sobre el espionaje porque se produce solo una autorización judicial previa, y no se hace un seguimiento posterior sobre los medios empleados y su proporcionalidad. Aprovechó para pedirle también que confirmara o desmintiera la información de El País, que avanza ya que este año tampoco se reformará la Ley de Secretos Oficiales porque el Gobierno español cree que no da tiempo o porque no es prioritaria. Paradójicamente, esa ley sí aparece en el Plan 2023. Bolaños se limitó a defender que el "compromiso democrático" del Gobierno español es "incuestionable" y, a partir de ahí, desvió la atención hacia el PP: "La democracia española sube en el ranking de The Economist, y no sube más porque el PP incumple la Constitución cada día".
Lo único que pudo obtener el PNV es un alegato genérico a favor de "seguir en esa línea", lo que provocó que las cámaras del Congreso captaran a Esteban resoplando en su asiento con gesto de exasperación ante las evasivas de Bolaños. El jeltzale lamentó en su cuenta de Twitter este "cierre en falso" y que Sánchez se desdiga de su compromiso". "Confirmado. El Gobierno se desdice del compromiso público del presidente Sánchez de modificar la ley del control judicial del CNI. Mucho eslogan bonito, pero mantienen leyes poco garantistas y franquistas", reprochó.
--