El PNV cree que la negativa de Podemos a apoyar por ahora la revisión fiscal de los jeltzales y los socialistas tiene que ver con los problemas de división interna en el espacio de la izquierda confederal. Por ello, los jeltzales creen que la propuesta que plantearon el PNV y el PSE a Elkarrekin Podemos sigue siendo buena. Y, en ese sentido, este martes han respondido con una apuesta por el diálogo, ofreciendo esa misma propuesta a todos los partidos, también al PP y a EH Bildu, pero con los límites muy claros. El PNV da a entender que la oferta que le hicieron a este partido es su posición definitiva y no van a entrar en una negociación que pretenda rehacerla por completo y desde cero.
En una nota enviada a los medios de comunicación, el PNV ofreció “al conjunto de partidos vascos” el acuerdo que alcanzaron los jeltzales, los socialistas y Elkarrekin Podemos sobre la revisión fiscal. El PNV asegura que sigue “abierto al diálogo y al acuerdo hasta el último minuto” en las Juntas de Bizkaia, Gipuzkoa y Araba y cree que hay tiempo para que todos los partidos se posicionen, pero dejando algo claro: “Este acuerdo fiscal constituye nuestra posición definitiva porque tenemos la convicción de que es un planteamiento bueno para el país. Y esta bondad ni siquiera la ha desmentido Elkarrekin Podemos, cuya decisión no ha tenido que ver con el fondo del asunto (las medidas propuestas) sino que ha obedecido a cuestiones internas”.
El flanco de Podemos parece bloqueado. Fuentes de este partido consultadas por Grupo Noticias matizan en primer lugar que no llegó a existir un acuerdo, sino una contraoferta de PNV y PSE que se sometió a consulta entre la militancia. E insisten en que, con esta propuesta, no es posible dar su apoyo. Quieren otra. PP y EH Bildu siguen igual de lejos y la tentación de entrar en una subasta aprovechando la necesidad de votos de los jeltzales y los socialistas está ahí. Y el PNV parece lanzar como mensaje que nadie puede pretender estirar el chicle o rehacer toda la negociación desde el principio porque este es el punto de llegada. Al PSE le interesa también continuar en base a esta propuesta que se le formuló a Podemos, porque es incompatible con el PP.
¿Pueden PNV y PSE hacer otra oferta a Podemos? No quedan muy claras las garantías de la operación y podría repetirse el mismo desenlace, porque Podemos ha ganado una consulta y no ha querido tirar de autoridad para aplicar el resultado por su división interna. La portavoz en Bizkaia, Eneritz de Madariaga, admitió en la cadena Ser que este puede ser un elemento de preocupación para PNV y PSE, pero insistió en pedir otra propuesta que corrija, a su juicio, la “falta de aportación de las rentas más altas”.
La división
Tras su consulta a la militancia, Podemos anunciaba el lunes que no estaba en condiciones de confirmar por ahora su respaldo a esta revisión, con el argumento de que la participación en la votación había sido escasa y el resultado no era muy concluyente. De todos modos, el respaldo a la propuesta ganó por tres puntos porcentuales, un 46% frente al 43% que la rechazó. Sin embargo, en las últimas horas ha salido a la palestra el rechazo de Ezker Anitza-IU a este acuerdo, y este partido tiene uno de los tres procuradores de Elkarrekin Podemos en Araba. Para más señas, IU forma parte ahora de Sumar en el Parlamento Vasco, y Sumar es el adversario que compite de manera más directa con Podemos y lo desbancó de la Cámara autonómica en las elecciones de abril. El voto de IU no es decisivo y ya se desmarcó en el Parlamento Vasco del acuerdo presupuestario con el entonces Gobierno de Urkullu. Por otro lado, un acuerdo con el PNV podría levantar ampollas en Podemos a nivel estatal, que viene de mantener un pulso precisamente en materia fiscal con los jeltzales por el gravamen a las empresas energéticas y ha acusado al PNV de ser el amigo de Repsol. Pero, en suelo vasco, Podemos se juega su influencia, ya que está fuera del Parlamento Vasco y, sin embargo, sí es decisivo para la revisión fiscal en Juntas de Gipuzkoa y Araba, donde PNV y PSE no tienen mayoría absoluta.
El PNV reivindica lo pactado
El PNV pone en valor que en tiempos de incertidumbre es “necesario” actualizar la fiscalidad “protegiendo a las rentas más bajas” (una de las cesiones a Podemos ha sido elevar el límite exento de pagar el IRPF a 20.000 euros) y “dando seguridad a las rentas medias”, abordando el problema del acceso a la vivienda para los jóvenes y el alquiler, fomentando la igualdad entre mujeres y hombres y la transición verde. “Y todo ello sin incidir negativamente en la recaudación, elemento clave para el sostenimiento de los servicios públicos”, recalcó. Por ello, el PNV “pone este acuerdo fiscal a disposición de aquellos partidos políticos vascos que quieran negociar y acordar. Porque eso es hacer política con mayúsculas: negociar y acordar en beneficio de la gente”.
El PNV ya había reconocido públicamente que Podemos era el socio más viable. El PP propone una rebaja generalizada de los impuestos que pondría en riesgo la recaudación, algo que no aceptan los jeltzales y que los socialistas declaran abiertamente incompatible con lo pactado; y EH Bildu ha convertido este debate en un ámbito para escenificar su alternativa. La revisión entra ahora en un terreno de incierto resultado, donde solo el vértigo a tumbar estas medidas podría mover el voto de la oposición.
Este miércoles, Andueza se cita con Vaquero
En Radio Popular, el secretario general del PSE, Eneko Andueza, había matizado por la mañana que a él no le gusta “caer en el dramatismo” y que sigue pensando que “hay margen para sacar adelante esa reforma, para negociar con Podemos y otros partidos”. Admitió que la indecisión de Podemos “sorprendió a propios y extraños” y recordó a su líder, Richar Vaquero, que su victoria también fue por un estrecho margen (17 votos) y no por ello renunció. Pidió a Podemos “valentía y, sobre todo, responsabilidad”. Precisamente este miércoles, en el marco de su ronda de contactos tras ser reelegido como líder del PSE, Andueza se reunirá con Vaquero. Sobre el PP, repitió que sus propuestas son “incompatibles” y los separa “un mundo”.
EH Bildu sí trata de proyectar que el acuerdo con Podemos es una vía muerta, para que el PNV pierda una baza. EH Bildu se mueve cómoda en la dialéctica derecha-izquierda y quiere llevar allí al PNV. El acuerdo con ella es improbable, toda vez que ha presentado de saque una enmienda a la totalidad y ha señalado este debate como uno de los terrenos para competir y escenificar su alternativa. Pello Otxandiano dijo en Euskadi Irratia que “hemos vuelto a la casilla de salida” y PNV y PSE deben decidir entre el PP o su grupo.
IU acentúa la división de Elkarrekin
Desde que Podemos anunció el lunes que su consulta a la militancia sobre la revisión fiscal había arrojado un resultado poco concluyente, comenzaron a surgir las preguntas. ¿Por qué no daba vía libre al acuerdo con PNV y PSE si, por muy ajustado que fuera el resultado, esa opción había ganado por tres puntos porcentuales? ¿Había algo más que la división interna en la consulta? ¿Alguien dentro del grupo de Elkarrekin estaba poniendo pegas a Podemos en Araba, donde el grupo juntero incluye a un representante de Ezker Anitza-IU? Este partido, en el Parlamento Vasco, opera dentro de Sumar, rival de Podemos. Como si respondiera a estas preguntas, Ezker Anitza-IU envió este martes una nota de prensa a los medios de comunicación para rechazar “el maquillaje fiscal” de PNV y PSE y proponer una “reforma fiscal de calado que avance en la progresividad y la justicia fiscal”. Rechaza también los cambios incorporados en las últimas horas, en una alusión velada a las cesiones a Podemos. Pero, aun con el desmarque de IU, la revisión saldría adelante en Araba si Podemos la apoyara, por 26 votos frente a 25.
A su juicio, la propuesta que se debate disminuye la recaudación y ahonda en la desigualdad. Esto supone desmarcarse de las negociaciones de Podemos, socio mayoritario en Elkarrekin, el grupo clave para sacar adelante la reforma en Juntas de Gipuzkoa y Araba. De todos modos, Ezker Anitza matiza en su nota que sus apreciaciones las hace “desde el máximo respeto a los debates y decisiones que cada una de las otras fuerzas del espacio Elkarrekin pueda tener”. Pero, dejando al margen la coletilla de cortesía, Ezker Anitza se emplea con dureza para rechazar la “supuesta reforma fiscal planteada por PNV y PSE”, y añade que “los cambios propuestos en los últimos días no mejoran este maquillaje fiscal”, según el procurador en las Juntas alavesas, José Damián García-Moreno. Entre esos cambios se encuentra una medida que elevaría el límite exento hasta los 20.000 euros anuales en el IRPF.
Frente a una reforma “de derechas”, IU defiende la suya, que “permitiría incrementar la recaudación de las haciendas en 1.311 millones anuales”. La de PNV y PSE, a su juicio, recortaría 235.