El PNV ha vuelto a exhibir su perfil más centrado e institucional frente a los extremismos. Aprovechando la tarde soleada y los días cada vez más largos, el PNV ha buscado hacerse oír con un acto de campaña para las elecciones europeas este viernes en el municipio marinero de Santurtzi, donde ha apostado por una Europa abierta y pujante, con comercio e industria y donde no se cierren las fronteras de la mano de los partidos extremistas que están en auge en la Unión Europea. Pero el PNV se desmarca de todos los populismos, sean de derecha o bien de izquierdas, y ahí está el matiz que le permite marcar perfil frente a todo tipo de ultras porque cree que ambos dividen a la sociedad y polarizan. No citó siglas, pero pareció lanzar un recado a la izquierda abertzale tradicional al asegurar que a algunos “les gustaba más la Unión Soviética que la Unión Europea” hace unos años. Ahora son los críticos con EH Bildu, agrupados en EHKS, los que cargan contra la Unión Europea y, de hecho, piden la abstención.
Pero, ¿importa o no quién tenga representación en estas elecciones, donde lo que se elige es un Parlamento en Bruselas y Estrasburgo? Ante el riesgo de abstención y de que se pierda el escaño jeltzale, el PNV avisó de que estas elecciones son tan vascas como las autonómicas y cree que no se puede dejar la representación de Euskadi en manos de esos partidos, ni tampoco de los estatales, a los que Euskadi les quedaría lejos. Por ello, pidió votar nuevamente al PNV, como el 21 de abril, porque en Europa se toman decisiones que afectan a Euskadi.
También se refirió a la ultraderecha y recordó que, desde este puerto, tuvieron que partir muchos niños vascos hacia otros países tras el golpe franquista. El PNV, al contrario que la candidata popular a presidir la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, no hace distingos entre partidos de ultraderecha y cree que no hay que pactar con ninguno. La candidata Oihane Agirregoitia no dejó margen para la duda: "No hay niveles ni jerarquías cuando hablamos de extrema derecha. En Euskadi, en Madrid y en Bruselas, ¡nos tendrán enfrente!".
Un comisario de Pesca
Por otro lado, Agirregoitia volvió a poner sobre la mesa las preocupaciones del sector pesquero y la necesidad de simplificar la burocracia y nombrar un comisario europeo de Pesca. Y, tras recordar la transformación que ha vivido Ezkerraldea, lamentó que los fondos europeos también se crearon con la intención de transformar la economía y reindustrializarla pero “no están sirviendo para su fin, o no al menos con toda la eficacia posible”. Por ello, exigió al Estado español que los proyectos estratégicos, los Perte regionales, “sean canalizados hacia las comunidades autónomas”.
“Creemos en una Europa de los pueblos, no solo de los estados. Somos quienes mejor conocemos el tejido productivo y podemos hacer que los proyectos sean transformadores", reivindicó Agirregoitia. La candidata tuvo el respaldo del futuro lehendakari, Imanol Pradales, quien fue recibido con entusiasmo en su localidad natal.
Europa pujante o cerrada
Ortuzar, por su parte, aseguró que en Santurtzi, un pueblo abierto, es fácil entender el mensaje “a favor de una Europa más fuerte y unida políticamente, más abierta y con más pujanza económica para hacer frente a dos tipos de amenazas: por un lado, la pelea entre China y Estados Unidos por ver quién lidera el mundo, en la que corremos el riesgo de quedarnos como peones de uno o del otro; y, en segundo lugar, la amenaza interna, la que suponen esas fuerzas populistas de extrema derecha y de extrema izquierda que quieren hacer descarrilar a Europa desde dentro, los que quieren limitar el desarrollo de Europa, los que quieren cerrar su puertas”.
“No es lo mismo una Europa abierta y pujante que una Europa cerrada y débil. A Euskadi, a nuestra industria y a nuestro comercio, a este puerto, le interesa la primera Europa, de la que va a venir crecimiento económico, empleo y bienestar. Y tampoco es lo mismo que los intereses de Euskadi los defienda un partido como el PNV, que los grandes partidos estatales a los que Euskadi les queda muy lejos, o algún otro partido de aquí, que hasta ayer era antieuropeo y ahora no se atreve a decirlo pero le gustaba más la Unión Soviética que la Unión Europea".
Pradales, recibido al grito de "ari, ari, ari, Imanol lehendakari"
Imanol Pradales será investido como lehendakari el 20 de junio si las negociaciones con el PSE no se tuercen y, en ese contexto, había cierta expectación por escuchar al jeltzale en Santurtzi, una localidad que además se volcó especialmente con su vecino de Mamariga. Fue recibido al grito de "ari, ari, ari, Imanol lehendakari". Pradales aseguró que Santurtzi es símbolo de memoria democrática porque desde allí, tras el horror de la guerra civil, tuvieron que partir multitud de niños y niñas vascas por el totalitarismo franquista. Y alertó contra los extremismos tanto de izquierdas como de derechas que “se retroalimentan entre sí” y que dividen a las sociedades. Apostó por cultivar la democracia día a día y avisó de que “es fundamental que Euskadi siga teniendo voz propia en Europa, que sigamos contando con la voz del PNV, que no solo creyó desde el primer día en el proyecto europeo, sino que tuvo un papel protagonista en su creación”.
El jeltzale reivindicó que Euskadi tiene que mantener su escaño en Europa y seguir defendiendo una política constructiva sin polarizaciones y frenando a los populismos, y también poniendo sobre la mesa propuestas como la macrorregión atlántica, el protocolo para que los territorios con competencias legislativas tengan voz en la toma de decisiones o abrir vías a las “realidades nacionales”. “Toca fortalecer nuestras instituciones, hacer la política responsable que quizá no es la más llamativa, tampoco la más rápida, pero sí la más efectiva. No miremos a otro lado, como sociedad tenemos una gran responsabilidad, está en nuestra mano cerrrar el paso a los extremismos”, alentó.
Movilizar
Los jeltzales tratan de movilizar a la ciudadanía para que vote en unas elecciones que no desatan demasiada euforia y que, para rizar el rizo, son más complicadas porque se vota por una única circunscripción a nivel estatal y no territorial. Para sumar fuerzas y mantener su escaño en el Parlamento, el PNV lidera la Coalición por una Europa Solidaria de la que forman parte también Coalición Canaria, Geroa Bai y los baleares Proposta per les Illes, y por la que pedirán el voto Compromiso por Galicia, Espacio Galego, Demòcrates Valencians y Treballem per Catalunya, que agrupa a exlíderes del PDeCAT y partidarios de la vía más pragmática de la antigua Convergència.
El PNV ha ganado todas las elecciones europeas en la comunidad autónoma vasca, salvo las primeras, que se celebraron en 1987 y se saldaron con la victoria de la izquierda abertzale por 2.295 votos frente a un PNV recién salido de la escisión de EA y que sufrió un importante bocado en su saca de votos.
Agirregoitia volvió a echar el resto para destacar la relevancia de las elecciones europeas y que la gente vote. “Europa es el mercado único y la libre circulación, son ayudas a la transición energética, ayudas para reformar las casas, y seguridad alimentaria para los productos que nos llevamos a la boca, es el programa Erasmus que han disfrutado once millones de personas, son los fondos europeos...”, argumentó.