El PNV seguirá gestionando las cuentas de Euskadi y las futuras transferencias

En el arranque de la nueva legislatura en Euskadi las formas y el fondo han caminado de la mano. Así, Imanol Pradales fue designado lehendakari el jueves pasado en el Parlamento Vasco tras pronunciar un discurso de investidura en el que desgranó su hoja de ruta. Y tras jurar el cargo el sábado en la Casa de Juntas de Gernika, dio a conocer el organigrama del nuevo Gobierno vasco, al que dotó de contenido con el decreto de reparto de áreas y funciones que firmó el domingo.

Su publicación en el Boletín Oficial del País Vasco permitió ir al detalle de las responsabilidades que asumirán los 15 departamentos del Ejecutivo de PNV y PSE. El mismo domingo llamó la atención el regreso de las políticas de Igualdad, lo que incluye Emakunde, a Lehendakaritza. También acogerá las políticas de atracción y retención del talento, y la representación y proyección de Euskadi en el exterior.

Más allá, el PNV seguirá elaborando los Presupuestos de la CAV cada año, en concreto el Departamento de Hacienda y Finanzas que lidera Noël d’Anjou Olaizola. Aquí también se encuadra la estabilidad presupuestaria y sostenibilidad financiera; el régimen de ayudas y subvenciones públicas; la gestión recaudatoria; el mercado de valores; las entidades de previsión social y el Concierto Económico, cupos al Estado y aportaciones de los Territorios Históricos; y, muy destacado, la valoración de competencias o servicios objeto de transferencia.

La veintena de competencias pendientes de transferir a Euskadi han marcado el diseño expansivo del Ejecutivo, el más amplio de la historia en Euskadi, ante la importante carga de trabajo que se prevé. Subrayada en rojo está la gestión económica de la Seguridad Social, acordada con el Gobierno de Pedro Sánchez y cuya gestión recaerá en el área de Economía, Trabajo y Empleo dirigida por Mikel Torres.

El ya exalcalde socialista de Portugalete se encargará a su vez de la planificación y gestión de los Fondos europeos de recuperación y resiliencia, hasta ahora en manos del PNV. También de la política de empleo y la formación profesional para el empleo; la ejecución de la legislación laboral y la economía social, y el sistema de Garantía de Ingresos e Inclusión Social.

Los 15 consejeros, 10 del PNV y 5 del PSE, con un marcado perfil gestor y de los que solo tres repiten respecto del anterior gabinete liderado por Iñigo Urkullu, tomarán posesión de sus cargos este martes. Lo harán, presumiblemente, empleando la fórmula tradicional y sobre un ejemplar del Estatuto de Gernika en el acto que se celebrará en el Palacio de Ajuria Enea. Inmediatamente después tendrá lugar la primera reunión del Consejo de Gobierno con el lehendakari Pradales a la cabeza.

El propio decreto que firmó el domingo definía las funciones y áreas de actuación de los distintos departamentos y Lehendakaritza de cara a propiciar una “transición ordenada”. Tras el reparto de funciones, los consejeros deben presentar antes del 31 de octubre, para su aprobación, los proyectos de reglamentos orgánicos de sus respectivas áreas, que deberán seguir los criterios organizativos marcados por el propio Pradales de “austeridad, aplanamiento de estructuras y agrupación de áreas funcionales con amplios contenidos”.

Perfil político

El nuevo Gobierno vasco también cuenta con perfiles de marcado peso político para gestionar áreas especialmente sensibles, es el caso de Seguridad, con Bingen Zupiria al frente. Se encargará por tanto de la seguridad ciudadana y administración electoral; protección civil y atención de emergencias; tráfico y seguridad vial; juego, apuestas y espectáculos; parque móvil policial y la meteorología.

En el mismo plano se sitúa el Departamento de Gobernanza, Administración Digital y Autogobierno de María Ubarretxena Cid, que se encargará de la política de desarrollo autonómico; la Secretaría del Gobierno; el Boletín Oficial del País Vasco; empleo público; modernización y reforma de la Administración, Irekia; la defensa jurídica del Estatuto de Autonomía; y el Servicio Jurídico de Lakua.

El perfil técnico marca, por su parte, otras áreas en manos jeltzales como Educación, que se encargará de la educación no universitaria y la planificación en el ámbito de la FP; Salud, que se ocupará de la ordenación sanitaria, la protección de la salud alimentaria y ambiental, la vigilancia epidemiológica y la ordenación farmacéutica; e Industria, Transición Energética y Sostenibilidad, con competencias como la transformación digital y la IA, la transición energética y la lucha contra el cambio climático.

Una de las novedades es el área de Ciencia, Universidades e Innovación tras desgajarse de Educación y con Juan Ignacio Pérez Iglesias al frente, que abordará la educación superior, la política científica, la gestión del Fondo de Innovación, los centros de innovación cooperativa y los centros de excelencia.

El área de Alimentación, Desarrollo Rural, Agricultura y Pesca tiene como tareas la promoción y ordenación agrícola y ganadera, el desarrollo rural, la ordenación y gestión del litoral, etc. En el caso de Cultura y Política Lingüística, se encargará de la promoción del euskera, patrimonio cultural y gestión y protección del Patrimonio Histórico Artístico. A ellas se suman Bienestar, Juventud y Reto Demográfico.

Centros penitenciarios

El PSE tiene 5 departamentos con las mismas áreas que hasta ahora tras desgajarse Vivienda y Movilidad Sostenible. Mantiene a su vez Turismo, Comercio y Consumo, y recupera el Departamento de Justicia y Derechos Humanos. Este último atenderá la relación con el Poder Judicial y la gestión de los centros penitenciarios, en especial su organización, funcionamiento y ejecución de la legislación penitenciaria. También asumirá la dirección y coordinación de las políticas de víctimas y de memoria, la política en materia de memoria histórica y democrática, el Instituto Gogora y la Agencia Vasca de Reinserción Social.