El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, está en el ojo del huracán tras las nuevas revelaciones de la tragedia de la valla de Melilla el pasado junio.
Tras la publicación del documental de la BBC que cuestionaba la versión oficial, y la visita del pasado lunes de una delegación de diputados a Melilla donde pudieron visionar nuevas imágenes del suceso, las voces en contra de Marlaska son más cada día que pasa, acusándole de haber mentido en sede parlamentaria cuando ofreció explicaciones sobre la tragedia.
Los socios habituales del Gobierno de Pedro Sánchez llevan días exigiendo explicaciones al ministro, mientras que el PP, que hasta hace poco no había cuestionado la versión oficial, endureció ayer martes el tono y reclamó a Sánchez el cese del titular de Interior.
Ayer martes, Marlaska amagó con emplear la comisión de gastos reservados que se celebraba en el Congreso de los Diputados para ofrecer explicaciones a puerta cerrada sobre Melilla pero, ante la presión de los grupos parlamentarios, indignados con la posibilidad de que el ministro aprovechara para hablar en una comisión que es de carácter reservado; reculó y finalmente se limitó a seguir la agenda ordinaria del órgano.
Uno de los partidos más críticos con Grande-Marlaska fue el PNV, cuyo portavoz, Aitor Esteban, afirmó que no aceptaría que la tragedia de Melilla se abordara en el Congreso en secreto. Finalmente no fue así, aunque Marlaska sí realizó declaraciones al respecto antes de entrar en la comisión.
El ministro del Interior se reafirmó en que “ningún hecho trágico” ocurrió en territorio estatal, en referencia a las muertes de migrantes junto a la valla de Melilla, y dijo estar dispuesto a comparecer de nuevo en el Congreso y a que los grupos puedan ver en el formato que decidan “todas las pruebas gráficas o documentales” sin editar, que son las mismas que ya se han remitido a la Fiscalía y al Defensor del Pueblo.
Pero ya ni siquiera en el PP compran dicha versión y ayer martes la portavoz de los populares en la Cámara, Cuca Gamarra, reclamó a Sánchez que cese a Marlaska por “mentir” en sede parlamentaria sobre lo sucedido en el salto a la valla del pasado junio.
“Lo que sorprende es que no haya sido cesado por parte de Pedro Sánchez después de tener constancia de que mintió en sede parlamentaria el pasado mes de septiembre”, expresó Gamarra.