donostia – Siete años, siete meses y 25 días lleva Carlos Lesmes al frente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), de los cuales más de una tercera parte los ha presidido en funciones. El jurista de corte conservadora ejerció cargos políticos durante el Gobierno de José María Aznar (PP) antes de presidir el órgano de gobierno de jueces: así, fue nombrado director general de Objeción de Conciencia en 1996 y años más tarde fue designado director general de Relaciones con la Administración de Justicia. Ahora, Lesmes ve cómo el partido gracias al que alcanzó la presidencia del CGPJ, bloquea sistemáticamente la renovación del mismo, en contra de su propia voluntad y obstruyendo el correcto funcionamiento de la Justicia española desde hace casi tres años.
Hace un mes, Lesmes trasladó su "hartazgo" y compartió su reflexión sobre la "degradación" del órgano que preside, que se encuentra en una situación "insostenible". Además, el presidente del CGPJ se comprometió a exigir a los partidos políticos la urgente renovación de la institución de cara a la próxima apertura del año judicial en septiembre. Sin embargo, desde el Partido Popular no hay prisa para desbloquear la renovación de un CGPJ en el que posee una mayoría conservadora, ya que su última renovación se realizó en el primer mandato de Mariano Rajoy.
En esta línea, el secretario de Justicia del PP, Enrique López, afirmó ayer no tener constancia de conversaciones entre Lesmes y el líder popular, Pablo Casado, para desbloquear la renovación del órgano. "Desde el PP no nos sentimos inquiridos, no establecemos vetos personales", señaló, en alusión a Juan Manuel De Prada, uno de los candidatos actualmente en activo en la Audiencia Nacional y a quien se atribuyen las frases más duras contra el PP en la sentencia de la Gürtel, que condenó al partido como partícipe a título lucrativo.
Sin embargo, el portavoz popular señaló que su formación sí quiere que renovar el órgano, pero asumiendo que en el futuro habrá que "cambiar el sistema de elección para que la mitad de los vocales, los judiciales, sean elegidos por jueces".
La asociación Juezas y Jueces para la Democracia (JJpD), hizo pública ayer una carta abierta al líder del PP, Pablo Casado, en la que le insta a desbloquear la actual situación señalando que no hay excusas que justifiquen la falta de acuerdo ni veto a jueces que "condenaron a su partido por corrupción". La asociación acusó a los populares de boicotear de forma "inexplicable" al CGPJ, así como al Tribunal Constitucional, el de Cuentas o el Defensor del Pueblo, también en funciones.
órgano atrofiado Para forzar el desbloqueo del órgano, PSOE y Unidas Podemos impulsaron la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial aprobada el pasado marzo, tensionando, aún más si cabe, la situación de la institución. Esta enmienda atrofió por completo el funcionamiento del CGPJ, impidiendo que acuerde nuevos nombramientos mientras esté en funciones (sí tuvo tiempo de designar antes un nuevo presidente para el Tribunal Superior vasco, Iñaki Subijana). Ante esta tesitura, los vocales se encuentran actualmente sin capacidad de actuación, lo que está alargando una situación que provoca el desprestigio de la Justicia española.