El presidente polaco, Andrzej Duda, ha encomendado hoy la formación de un nuevo Ejecutivo al primer ministro en funciones, Mateusz Morawiecki, según anunció esta tarde en un mensaje televisado.
En su alocución desde el palacio presidencial de Varsovia, Duda resaltó que de esta manera "continúa con la tradición parlamentaria, según la cual el partido ganador (de las elecciones) es el primero en tener la oportunidad de formar un Gobierno".
El gobernante partido ultraconservador Ley y Justicia (PiS), vencedor de los comicios del pasado 15 de octubre, carece de mayoría parlamentaria, por lo que la decisión de Duda previsiblemente solo servirá para posponer la formación de Gobierno por parte de una alianza de partidos opositores.
La coalición conservadora liderada por el PiS obtuvo solo 194 de los 460 escaños de la Cámara Baja, mientras que la alianza formada por los principales partidos de la oposición aspira a formar un Ejecutivo encabezado por el liberal Donald Tusk, gracias a los 248 diputados que obtuvieron en conjunto.
Duda subrayó que los representantes de ambas facciones presentaron sendas candidaturas y expresaron su disposición para constituir un Ejecutivo y aseguró que "cada parte expresó su convicción de que logrará reunir la mayoría necesaria".
Tras la designación de Morawiecki, el nuevo Parlamento celebrará una sesión constituyente el 13 de noviembre bajo la dirección de Marek Sawicki, un diputado de la oposición que por su carácter de veterano ha sido nombrado por el presidente de manera provisional para ejercer esta función.
Ese día, el actual Gobierno en funciones presentará su dimisión y se propondrá a Morawiecki como candidato a jefe del nuevo Ejecutivo y, de no resultar elegido por mayoría absoluta, Duda tendrá dos semanas para designar a otra persona como encargada de formar Gobierno.
Los líderes de los partidos que componen la alianza opositora hicieron en los últimos días un llamamiento a Andrzej Duda para que aceptase encargar la formación de Gobierno a Tusk y ofreciese así "una cooperación constructiva que acabe con el suspense" a través de "una decisión rápida, sin perder ni un segundo más, porque si lo que (el presidente) necesita saber es si hay una mayoría, nos gustaría informarle de que sí, la hay".