Ya hemos consumido una cuarta parte del año y hemos tenido la ocasión de disfrutar con algunas series que ya se contaba con que estuvieran entre las más destacadas y otras que se han convertido en gratas sorpresas incluso superando toda expectativa.
Entre estas últimas está, sin duda alguna, Adolescencia, la serie británica que ya acumula tres semanas consecutivas en lo más alto del ranking de Netflix y a gran distancia de sus perseguidoras. La ficción que narra la historia de Jamie, un niño de 13 años acusado de un asesinato, y rodada en plano secuencia ha ido más allá de lo televisivo y se ha convertido en objeto de debate social o político y se ha anunciado que se ofrecerá en los institutos del Reino Unido.
Muchas de las referencias en medios y webs especializadas, además de hablar de la serie desde lo técnico o lo interpretativo centrándose en el joven protagonista, Owen Cooper, están plagadas de opiniones de expertos como psicólogos y psiquiatras infantiles.
Del ámbito internacional también han destacado dos títulos de Apple TV+: Separación y The Studio. La primera, que narra el experimento laboral al que son sometidos los miembros de un equipo de empleados de una empresa cuyos recuerdos se han separado quirúrgicamente entre los de su trabajo y los de su vida personal, ya causó sensación en su estreno y el pasado enero llegó la segunda temporada, en la que los protagonistas descubren las consecuencias de la citada experiencia.
Por su parte, The Studio es una historia muy bien narrada con agresivos ejecutivos cinematográficos como protagonistas.
Producción española
Entre los títulos de producción cercana, el año comenzó con la tercera temporada de Machos Alfa en Netflix y después nos ha dejado dos títulos con la realeza como protagonista aunque en diferentes épocas. Ambos estrenados en febrero. Primero fue La vida breve, miniserie de Movistar Plus+ sobre el reinado de Luis I con intérpretes protagonistas como Javier Gutiérrez o Leonor Watling.
Con un perfil mucho más actual Prime Video estrenó Su majestad, en la que Anna Castillo interpreta a una princesa vividora y caprichosa que debe asumir el trono durante la ausencia temporal de su padre, el rey, afectado por un caso de corrupción.
Más reciente está el estreno de Cuando nadie nos ve, serie de Max de la que la plataforma ya ofrece cinco de los ocho episodios de que consta y en la que Maribel Verdú cumple su deseo de ser dirigida por el bilbaino Enrique Urbizu.
La actriz madrileña destaca en su interpretación de una sargento de la Guardia Civil.