El proceso de modernización de Ibaia, uno de los proyectos estratégicos del Deportivo Alavés de cara a su consolidación como un club de élite en la máxima categoría, adquirirá velocidad de crucero durante los próximos meses. Así lo ha dejado claro este martes Jesús Vázquez en una entrevista en Radio Vitoria.
El director general institucional del grupo Baskonia-Alavés ha explicado que la intención del club radica en, una vez se solventen los siempre farragosos trámites urbanísticos, iniciar las obras a lo largo de la próxima primavera, en concreto entre los meses de marzo y abril.
Tras el acuerdo alcanzado en su día para la compra de las tres parcelas privadas que se encuentran justo a continuación de las actuales instalaciones en dirección al concejo de Zuazo de Vitoria y el posterior estudio de dicho espacio para conocer el número de campos que se podían construir en dicha zona una vez completada esta anexión, el Alavés ya ha perfilado con más exactitud el tipo de mejoras que pretende de cara a su ciudad deportiva.
En concreto, sus rectores quieren contar en Ibaia con dos nuevos campos de fútbol para la temporada 2022-23, además de construir una nueva grada entre el parking y el primero de los campos –sería la segunda en muy poco tiempo tras la edificada para que el público pueda presenciar los partidos de las Gloriosas en la Liga Femenina– y una nueva cafetería con terraza que se ubicaría en la parte baja de la instalación.
"Es una grada que lo que hace es salvar el desnivel entre el parking del público y el nivel del campo de abajo. En esa grada, que se conecta con la parte del parking de arriba, habría un espacio cubierto con bar cubierto con terraza y con acceso a la grada directamente", precisó Vázquez, quien también avanzó la necesidad de efectuar otro tipo de reformas para favorecer las comodidades de Ibaia.
El Alavés confía en obtener en un corto plazo de tiempo los permisos necesarios para culminar el principal proyecto que maneja para su consolidación patrimonial. La reforma de Mendizorroza ha entrado en punto muerto tras la crisis económica derivada de la emergencia sanitaria e Ibaia será el centro neurálgico donde el Alavés quiere afianzar otras infraestructuras tras dar por perdido el anhelo inicial de instalarse en Betoño.
La superficie de Ibaia se ha visto ampliada hasta los casi 110.000 metros cuadrados tras la adquisición de las últimas parcelas, pendientes eso sí todavía de los trámites administrativos. Y es que el proyecto planteado por el Alavés precisa variar la calificación del terreno para que deje de ser considerado agrícola y pueda acoger equipamiento deportivo. En febrero de este año arrancó el cambio del plan general urbano para dar luz verde a la ciudad deportiva.
Sin la correspondiente adecuación urbanística al calado de las obras a acometer y sin la pertinente regularización de las construcciones levantadas en la última reforma, ejecutadas en su día sin las pertinentes autorizaciones, el Alavés no podrá iniciar los trabajos.
"Queremos conseguir los permisos para que en primavera empecemos la construcción de dos campos más y otras reformas", ha confirmado Jesus Vázquez. La inversión total del Alavés para dotar a Ibaia de nuevas infraestructuras –también se prevé la creación de un segundo bar en una segunda fase– asciende a más de cinco millones de euros.
Las trabas también han sido numerosas en todo este proceso por culpa de un camino propiedad del concejo de Zuazo que se encuentra en medio de las parcelas adquiridas en su día por el Alavés, algo que impedía legalmente a la entidad del Paseo de Cervantes unir en una sola pieza continua todas sus propiedades. En este sentido, las altas instancias del club siguen manteniendo conversaciones periódicas con los vecinos del lugar para hacerles saber que se ha efectuado un estudio con el fin de eliminar la posible contaminación de las nuevas infraestructuras.