El programa de detección precoz de cáncer de cuello de útero (cervix) puesto en marcha en 2018 por Osakidetza permite detectar 4 de cada 10 casos, que en el 70 % de las veces están en un estadio inicial lo que aumenta notablemente las posibilidades de supervivencia.
Con motivo de la celebración este domingo del Día Mundial de Prevención del Cáncer de Cervix, el Departamento de Salud ha recordado que cerca de 400.000 mujeres han sido invitadas a participar en Euskadi en estos cribados, que el pasado año alcanzaron el 100 % de la cobertura en mujeres de entre 25 y 34 años y que en 2024 llegarán hasta las que tengan 65 años.
Sólo en 2022 se han analizado 102.426 muestras y de las mujeres que se hacen la prueba la gran mayoría de tiene un resultado de bajo riesgo. En cambio, un 7 % requiere un estudio más exhaustivo para la confirmación del diagnóstico.
Este tipo de programa en los que se invita activamente a participar son muy importantes en el caso de este tipo de patología, ya que el 60 % de los diagnósticos se da en personas que nunca se han realizado un cribado o que se ha hecho de manera inadecuada.
En Euskadi, entre 2018 a 2021 ha habido cerca de 400 casos de cáncer de cérvix, de los que en torno al 40 % han sido detectados a través del programa. Además, entre los encontrados a través del cribado, el 72,06 % estaban en estadios iniciales.
Esto tiene un impacto también en el índice de supervivencia, ya que la mortalidad es del 36,23% en el caso de las personas a las que se les detecta el cáncer por sintomatología o hallazgo casual, mientras que entre las diagnosticadas a través del programa la mortalidad es del 2,94 %.
El objetivo principal de esta iniciativa es detectar las personas que tienen mayor riesgo de poder tener una lesión en el cuello de útero y así poder prevenir que evolucione a cáncer.
Durante los últimos años, Osakidetza recuerda en una nota que se están produciendo muchos avances en la prevención de este cáncer como la utilización de test de la detección del virus del papiloma humano de alto riesgo (VPH) como prueba de cribado, ya que este virus es la causa de prácticamente la totalidad de casos de cáncer de cérvix.
Osakidetza dispone de una unidad de cribado unificada en el Hospital Universitario Donostia, donde se analizan todas las muestras.
El programa envía una notificación a través de SMS o carta invitando a participar en él a las mujeres con edades comprendidas entre 25 y 65 años.
A través del mensaje se puede coger una cita con la matrona que realizará la prueba de cribado, que consiste en tomar una muestra de las células que recubren el cuello de útero.
Los resultados se reciben, igualmente, mediante SMS, menos cuando sea necesario repetir la prueba o se considere la derivación a Ginecología. En este caso, la explicación se realiza a través de una llamada de teléfono.
En este sentido, en el apartado "Osasun Eskola" de la página web de Osakidetza se han publicado unos vídeos que ayudan a las mujeres a entender qué es el VPH, qué significa tener un resultado alterado y cuáles son las pruebas complementarias que se podrían hacer en estos casos.
El programa se inició de forma escalonada en las diferentes zonas y en 2019 se implantó completamente en toda la red de Osakidetza, si bien la invitación a participar en el cribado se fue haciendo de manera escalonada en función del rango de edad, empezando por las más jóvenes.