Los dos parques eólicos que Statkraft plantea construir en Gipuzkoa, uno de ellos compartido con Álava, contempla la instalación de un total de 13 aerogeneradores que producirán 238,5 gigavatios al año, suficientes para suministrar energía limpia a 272.900 personas, según confirma la empresa a este diario.
El mayor número de aerogeneradores, ocho, corresponderán al parque eólico Itsaraz que se construirá en terrenos de la localidad guipuzcoana de Eskoriatza y de la alavesa de Aramaio y que, con una inversión de 60 millones de euros, permitirá producir 153,8 gigavatios al año. La compañía noruega calcula que un hogar tiene un consumo diario medio de 9,5 kilovatios, por lo que daría servicio a 44.100 hogares y 176.000 personas anualmente.
“ Los dos parques eólicos podrían comenzar a funcionar a inicios de 2027 ”
Por su parte, el proyecto Piaspe se ubica en Azpeitia, Zestoa y Errezil, donde prevé erigir los cinco aerogeneradores restantes con una producción anual de 84,7 gigavatios al año. De acuerdo con los mismos cálculos, esta energía renovable podría llegar a 24.300 hogares y 96.900 personas al año. La inversión en este parque asciende a 32 millones de euros.
Respecto al empleo que generarán estos proyectos, fuentes de la compañía advierten de que resulta difícil ofrecer una cifra con total certeza, puesto que los proyectos se encuentran en una fase muy temprana. No obstante, y si se trasladan los números registrados en parques construidos con anterioridad, los guipuzcoanos podrían crear 330 puestos de trabajo.
La mayor parte de ellos surgirían durante la etapa de construcción, que requiere más personal, pero también se contempla empleo para la operativa diaria. Un total de 200 puestos de trabajo corresponden al parque Itsaraz, que tiene mayores proporciones, mientras que los 130 restantes se generarían con el proyecto Piaspe.
REDUCCIÓN DE CONTAMINANTES
La información facilitada por Statkraft también incide en la contribución al medio ambiente de esta iniciativa. Según los datos de los que dispone, Itsaraz evitaría la emisión a la atmósfera de 3.585 toneladas, que corresponden a la contaminación que producen 2.000 vehículos que utilizan combustión tradicional.
Por su parte, Piaspe soslayará la emisión de 1.970 toneladas de CO₂, una cantidad similar a la producida por 1.100 vehículos del mismo estilo.