“Feijóo es un jefe de la oposición a la fuga”. Así descalifica Moncloa la forma en que el líder del PP y su partido echan balones fuera para despreciar la solicitud de reunión trasladada a Génova por parte de Pedro Sánchez, después de que ayer caducara la primera de las fechas propuestas por parte del líder del PSOE. “Aún quedan dos opciones y la pelota está en su tejado”, consideran desde el Ejecutivo español, que carga contra lo que consideran como “un hecho grave y sin precedentes”. En las filas socialistas emplazan a Alberto Núñez Feijóo a “dejar de dar excusas de mal pagador y decidir si esta legislatura va a abonarse al berrinche y la hipérbole o, por el contrario, intentará llegar a acuerdos que sean productivos para España”. “Por el momento, se ha instalado en la primera opción”, lamentan.
Sin embargo, desde el PP intuyen que Sánchez quiere esa cumbre para “tapar la indignidad de las fotos que le han hecho presidente” del Ejecutivo, entre ellas la que se hizo con la portavoz de EH Bildu en el Congreso, Mertxe Aizpurúa, o las de su secretario de Organización, Santos Cerdán, en “reuniones secretas con mediador por medio” con el expresident Carles Puigdemont. Así lo afirmó su portavoz en el Congreso, Miguel Tellado, quien solicita al dirigente socialista que antes tiene que aclarar “para qué” es el encuentro. Así las cosas, los populares se mantienen en sus trece y reclaman un orden del día por escrito para concretar el encuentro.
“Es muy difícil llegar a pactos de Estado con un partido que se sustenta en el Gobierno con los partidos independentistas y antisistema que quieren debilitar al Estado. Esa es la gran mentira de Pedro Sánchez, que no es un hombre de Estado. Es un líder político que solo piensa en su propia supervivencia y que España, los españoles, nuestras instituciones y nuestra democracia le importan bien poco”, verbalizó el portavoz del PP. Entre tanto, Génova exige rigor y seriedad y no “navajeo” ni “prácticas torticeras” al Gobierno a la hora de fijar la cita. El portavoz del PP, Borja Sémper, denunció que no hay comunicación entre los gabinetes de Sánchez y Feijóo y que Moncloa no ha informado formalmente al PP del orden del día de la cumbre, sino que se ha limitado a proponer tres fechas, lo que ve “poco profesional”. “Alguien decía en broma: a lo mejor tenemos que convocar en Ginebra y así le interesa más al señor Sánchez, pero España no está para bromas, no está para juegos partidistas, para este navajeo a corto plazo estratégico y táctico y menos si es impulsado por el presidente del Gobierno”, subrayó Sémper.
El Gobierno de Sánchez ofreció al PP tres fechas, el 18, el 22 y el 29 de diciembre, según fuentes de Moncloa, pero el calendario sigue corriendo, con el PSOE acusando al PP de poner excusas y los populares señalando que no quieren picar el “anzuelo” de hablar de la reunión mientras se tramita la amnistía o el PSOE da la Alcaldía de Iruñea a EH Bildu. El PP insiste en que quiere oponerse al Gobierno en la calle, el Congreso y el Senado, pero también cara a cara. “Nosotros no rechazamos hablar y debatir sobre intereses generales de España. No le estamos pidiendo ni amnistía ni indultar a terroristas, ni lo que está pidiendo Junts, le estamos pidiendo un orden del día”, recalcó Sémper.
Crítica del pnv
Por su parte, el portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, criticó que Sánchez y Feijóo no tengan “algo de diálogo” porque “son dos auténticos muros”, y adjetivó como “desesperante” que no acuerden entre ellos porque, de ser así, “algunas instituciones y mecanismos funcionarían mejor”. “Lo raro” es que no se hayan reunido todavía y que “no tengan algo de diálogo”, porque “son dos auténticos muros, uno enfrente del otro”.
Sánchez tiene previsto verse este próximo jueves con el president de la Generalitat, Pere Aragonès, una cita que el PP aprovechó también para cargar contra el Gobierno. “Irá a rendirle pleitesía y así poder reunirse después con Carles Puigdemont, eso sí, fuera de España”, arremetió Sémper.