Actualizado hace 3 horas
Vivir en un entorno tranquilo, rodeado de naturaleza y alejado del bullicio urbano es el sueño de muchos. En este sentido, Álava, a lo largo y ancho de su territorio, cuenta con localidades más que apetecibles para quienes buscan paz, tranquilidad y calidad de vida. Lo cual da lugar a una pregunta: ¿Cuál sería el pueblo más tranquilo para vivir en nuestra tierra?
Para salir de dudas, hemos apostado por el criterio de la inteligencia artificial de ChatGPT para obtener una respuesta más concreta y acertada. Después de consultar a la herramienta, esta es la respuesta: Apellaniz (Arraia-Maeztu).
Un remanso de paz en Apellaniz
Ubicado en un enclave privilegiado, Apellaniz (Apilaiz en euskera) es un concejo que forma parte del municipio de Arraia-Maeztu. Esta pintoresca zona, con poca población, calles empedradas y un entorno natural impresionante, se erige como el destino ideal para escapar del estrés diario.
Rodeado por la sierra de Entzia, Apellániz posee belleza paisajística y un ritmo de vida pausado. La ubicación de este pueblo, a la sombra de la Peña de San Kristobal y los Montes de Izki, lo convierte en un lugar para disfrutar de la tranquilidad y la naturaleza.
Historia y patrimonio cultural
En documentos históricos, Apellaniz aparece mencionado bajo diferentes nombres. La villa, que ostenta el título de tal, fue concedido al Marqués de Castrofuerte, ha sido un punto de paso importante para quienes desde La Rioja y Navarra, se dirigían hacia la Llanada y Cantabria a través del conocido “Camino de los Arrieros”.
Desde 1958, Apellániz forma parte del municipio de Arraia-Maeztu, lo que ha permitido preservar su esencia y fomentar el desarrollo sostenible del área, así como a una mejora de infraestructuras y servicios.
Estructura de la villa
Apellániz se compone de tres barrios: Bengara, Lespara y Goikara, cada uno con su propio encanto. Las casas de la villa han sido restauradas casi en su totalidad, conservando la estética tradicional, mientras que algunas construcciones nuevas se han integrado con respeto por el entorno.
Bengara, ubicado en la parte más alta, se encuentra separado de Lespara y Goikara, que forman un único núcleo urbano. En el barrio de Lespara se halla la plaza principal, donde se encuentran el ayuntamiento, la iglesia parroquial dedicada a la Asunción de Nuestra Señora, y otros espacios comunitarios como un parque infantil y un frontón.
El barrio Goikara destaca por su patrimonio arquitectónico, que incluye la casa-palacio de los Fernández de Viana, construida en 1607, y otra casa blasonada de la familia Yurre. A lo largo de la villa, se pueden encontrar fuentes, abrevaderos y lavaderos que enriquecen su valor cultural.
Entre los barrios de Bengara y Goikara, se ubican restos de la antigua fábrica de electricidad y un molino de 1923, que rememoran la historia industrial de la zona. Un elemento de conexión entre los barrios es el puente de Torrostea, construido en 1889, que añade un toque histórico a los paseos por la villa.
![Edificio en Apellaniz](https://cdn2.ondavasca.com/4a38df9f-4149-48f9-9bc0-5d3d976197c4_16-9-discover.jpg)
Edificio en Apellaniz
La iglesia parroquial de la Asunción de Nuestra Señora
Uno de los principales atractivos de Apellániz es su iglesia parroquial de la Asunción de Nuestra Señora. Su arquitectura, que data del siglo XVII, destaca por su planta en forma de cruz latina y su única nave, cubierta por una bóveda gótica.
La portada románica y los canecillos románicos del muro norte, que pertenecen a la iglesia original, son testigos de su rica historia. La torre de planta cuadrada, construida en 1620, se erige con elegancia, mientras que el retablo mayor, de estilo rococó, es el corazón de la iglesia, con la imagen de la Asunción de Nuestra Señora y otros santos que la acompañan.
La sacristía, el baptisterio y el coro son otros elementos que completan esta construcción religiosa, que se convierte en un lugar de encuentro para los habitantes del pueblo y un atractivo para los visitantes que buscan conocer su patrimonio cultural.
Mil criterios posibles
Dado que determinar la tranquilidad es una misión más que compleja, hay que tener en cuenta que esto es única y exclusivamente un criterio más. Del mismo modo, habrá quien tenga unas pautas diferentes para calificar un lugar como calmado y tranquilo entre todos los pueblos que conforman la geografía alavesa.