El Gobierno británico anunció este lunes que cobrará un impuesto al carbono sobre los bienes importados, que se hará efectivo en 2027 para apoyar la campaña de descarbonización.
Las importaciones de hierro, acero, aluminio, cerámica y cemento del extranjero enfrentarán un precio de carbono comparable al de los bienes producidos en el Reino Unido, indica un comunicado divulgado este lunes por el ministerio británico de Economía.
El Reino Unido ha sido la primera gran economía en legislar para lograr emisiones netas cero y está reduciendo sus emisiones más rápido que cualquier otro país del G7 (los más industrializados), agrega.
La descarbonización de la industria del Reino Unido es una parte importante para lograr la transformación energética necesaria para lograr la emisión cero, pero estos esfuerzos no tendrán éxito si esta medida conduce a mayores emisiones en el extranjero, dice la nota.
Las nuevas reglas abordarán la "fuga de carbono", reduciendo el riesgo de que la producción y las emisiones asociadas se desplacen a otros países porque tienen un precio de carbono más bajo, puntualiza la cartera de Economía.
"Este impuesto garantizará que los productos extranjeros con alto contenido de carbono, como el acero y la cerámica, enfrenten un precio de carbono comparable al de los producidos en el Reino Unido, de modo que nuestros esfuerzos de descarbonización se traduzcan en reducciones de las emisiones globales", dijo el ministro de Economía, Jeremy Hunt.
"Esto debería dar a la industria del Reino Unido la confianza para invertir en la descarbonización a medida que el mundo pasa a cero emisiones netas", añadió.