Un restaurante de comida china de la avenida de la Zurriola utiliza desde el pasado verano un autómata para llevar los platos del buffet, que ya no es libre por el covid.
El robot camarero ha llegado a Donostia. Los comensales del restaurante chino Qing Wok, situado en la avenida de la Zurriola, cuentan desde el pasado mes de agosto con este aparato que va llevando los platos solicitados a las mesas y enciende la luz de la bandeja para que los comensales sepan que ese es su pedido. Además, el aparato, fabricado en China, tiene entre sus funciones la de cantar el Cumpleaños Feliz a los clientes en castellano, inglés y chino. Entonces aparece en su pantalla un rostro.
El robot, que es habitual en restaurantes de mucho trajín en ciudades grandes, no se había visto en las mesas donostiarras, cree la encargada del establecimiento, Fang Hong. La hostelera llegó directamente a Donostia desde China en 2009 y desde entonces regenta con su marido el restaurante ubicado en un amplio local, con un piso subterráneo en el que hay un "txiki park", ahora cerrado por la pandemia,
Para la hostelera, el robot servidor es muy práctico, especialmente en la actual situación de pandemia, cuando las autoridades sanitarias les indicaron que el buffet libre que tenían con anterioridad no era adecuado.
"Entonces pusimos un buffet libre a la carta. Ya no hay un espacio central en el que el cliente puede coger lo que desee, pero lo puede ir pidiendo con su móvil y el código QR", explica la responsable. El robot dispone de cuatro bandejas y cada vez puede llevar cinco platos. Pero los comensales pueden pedir cuantas veces quieran.
Para Fang Hong, la nueva situación que impide que haya un buffet libre clásico por motivos sanitarios tiene también sus ventajas. "No se desperdicia comida y todos los pedidos están frescos, recién hechos", explica. Y añade que el robot ayuda al reparto rápido en un momento en el que la pandemia ha reducido la cantidad de clientes y, en consecuencia, de empleados en el local, que fluctúan según las necesidades.
"a los jóvenes les gusta"
La irrupción del robot camarero se ha tomado con mucha normalidad entre los comensales, muchos de los cuales lo habían conocido por la televisión o Internet. "A los jóvenes les gusta mucho", dice la encargada del restaurante, que no descarta ponerle un compañero al autómata si remonta la crisis motivada por el covid.
De hecho, en los restaurantes de buffet hay menos camareros que en los convencionales porque son los clientes los que se sirven los platos. En la actual situación de buffet libre a la carta, Fang Hong cree que el robot es ideal.
Aunque en Gipuzkoa la presencia de un robot que lleva la comida a la mesa es novedad, la realidad es que existen ya en el mercado distintos tipos de autómatas que no solo transportan los platos sino que, también, indican a los comensales dónde deben sentarse. Además, algunos establecimientos han elegido que toda su plantilla sea humanoide. Existen pues tanto robots sencillos, como el que trabaja en Donostia, con una pantalla en la que sale el rostro de un gato y se pueden teclear las órdenes, pero otros más sofisticados, con apariencia humana.