Sexta derrota de la temporada y fin a la racha de tres victorias consecutivas del cuadro de Oriol Riera que, ante el Sestao River, se mostró demasiado inferior durante gran parte del encuentro, sobre todo en una primera mitad que acabó condicionando el resto del encuentro. Una derrota que, sin embargo, mantiene al cuadro navarro en tercera posición a la espera de finalizar la primera vuelta la próxima semana en casa ante el Beasain.
Con una disposición táctica de tres centrales le tocó al Tudelano apretar los dientes en defensa ante un Sestao River que botó cuatro saques de esquina en los dos primeros minutos. Los navarros, de momento, se mostraban sólidos en defensa y lejos de encerrarse parecieron estirarse con peligro a la contra por los costados.
Un disparo del carrilero Sarriegi a las manos del guardameta fue la primera oportunidad de un encuentro que en los siguientes instantes se convirtió en un pulso muy nivelado con un líder ahora más precavido.
Sin embargo, cerca del ecuador de la primera mitad los vascos metieron un ritmo más alto al choque y el Tudelano salvó casi bajo palos un disparo a bocajarro. Fue el preámbulo de lo que 5 minutos después fue el 1-0 al cabecear Leandro un buen servicio desde la derecha. Casi a renglón seguido Sarriegi, con un chut muy intencionado se encontró con la respuesta del cancerbero en una gran ocasión para haber restablecido la igualdad.
Pero los hombres de Oriol Riera acusaron el golpe del gol y poco faltó para que el rival abriera una mayor brecha antes del descanso con otras dos meridianas ocasiones, una de ellas de nuevo salvada bajo la línea de gol. Demasiado blandos en los despejes, la derrota mínima en la primera mitad se convertía en un mal menor para los visitantes.
En el arranque de la reanudación, Mikel Santamaría desviaba lo justo un disparo con marchamo de gol en otra oleada del líder que quería evitar complicaciones de última hora. El Tudelano continuaba sin la necesaria intensidad y se veía desbordado en demasiadas acciones y apenas carburaba del medio campo en adelante.
A falta de media hora para el final, Oriol Riera buscó esa mordiente ofensiva en el banquillo, primero con el debut de Moha en la posición de extremo izquierdo para hacer de enlace a un demasiado solitario hasta entonces Bueno en la punta de lanza.
Con el paso de los minutos, los navarros se hacían más con el cuero pero el líder no daba no daba ni la más mínima fisura atrás dejando frustado al Tudelano en cada uno de sus intentos. Telletxea y Luc Carrera entraron para encontrar algún resquicio y ese último pase para generar, al menos, una oportunidad que permitiera rascar un punto en Las Llanas.