Una iniciativa solidaria en Vitoria recoge portátiles y tabletas para los jóvenes afectados por el volcán
La chilena Orietta Valladolid, afincada en Vitoria, ciudad donde además de tener su propia empresa colabora en el área de Migraciones de la Diócesis de Vitoria, decidió no quedarse de brazos cruzados tras enterarse por los medios de comunicación de toda la destrucción que estaba generando el volcán de La Palma. "Yo soy de Chile y en mis país tragedias hay muchas, pero también sé que mientras está el problema están todos los medios, pero lo más duro viene después, cuando hay que reconstruir, momento en el que la gente parece que se empieza a olvidar de sus necesidades", destaca Valladolid.
Así, en noviembre, a título particular, se le ocurrió que una buena manera de poner su granito de arena era recogiendo juguetes para las niñas y niños afectados por el Cumbre Vieja, dado que muchos de los cuales han perdido sus casas e incluso sus colegios, al haber sido arrasados por la coladas, motivo por el que también decidió enviar ordenadores portátiles y tabletas para los adolescentes, "pero al contactar con la autoridades de El Paso nos dijeron que toda esa parte de juguetes, al coincidir con la llegada de la Navidad, ya contaban con ONG y otras entidades que ya los estaban donando, pero que sí que tenían problemas para que los jóvenes e incluso los pequeños pudieran tener portátiles y tablets con los que poder seguir sus estudios".
Llamadas
A raíz de esta llamada, su iniciativa solidaria decidió centrarla únicamente en la recogida de ordenadores portátiles y tabletas, teniendo en cuenta que el volcán en ese momento estaba dejando sin colegio a 4.400 alumnos de La Palma, dado que las coladas afectaron a 20 centros educativos de varias localidades tras cubrirlos de ceniza o destruyendo sus instalaciones. Es más, incluso volvió a contactar con La Palma para cerciorarse de que seguían con esas mismas necesidades, una vez que se dio por apagada oficialmente la erupción.
"Y me volvieron a decir que la necesidad seguía allí porque si bien es cierto que ya no están con el problema del aire, están con el de la distancia porque hay colegios quemados y niños que han perdido todos sus útiles. Entonces, la mejor manera de que no les falta de nada es reunir estos dispositivos para que puedan seguir con sus clases", resalta esta mujer que en esta iniciativa finalmente no ha estado sola porque ha contado con la ayuda de Ainara Sánchez, de la copistería Garsán, de la calle Fueros 43, "que es la que ha diseñado los carteles para dar a conocer la iniciativa solidaria". Otra organizadora ha sido Coach Social, que es la empresa que la propia Orietta Vallladolid tiene como autónoma. Asimismo, otras entidades colaboradoras han sido la diócesis de Vitoria, que ha ofrecido el Seminario como almacén, y Nacex, la empresa de mensajería que se ha ofrecido a llevar gratis a esta isla de las Islas Canarias todo el material que donen los alaveses.