A 42 días para que comiencen los Juegos Olímpicos de Invierno, esos que se celebrarán en Pekín del 4 al 20 del próximo febrero, Lucas Eguibar (Donostia, 1994) se encuentra exultante. Cómo no estarlo si a falta de mes y medio para la cita china, el rider vasco se muestra no solo pleno de forma, sino también lleno de moral. Y es que el deportista de Basque Team se llevó la medalla de bronce en la Copa de Mundo de snowboard cross disputada la semana pasada en la estación italiana de Cervinia. Es decir, Eguibar fue tercero en la última prueba de un 2021 muy feliz para el donostiarra, puesto que en febrero se proclamó campeón del Mundial de Idre Fjäll (Suecia) con una gran actuación. Sin embargo, ese cetro, logrado tras una épica remontada, pertenece a la temporada pasada. Y la presente no comenzó del todo bien para el vasco. Muy lejos de su mejor versión en la primera prueba y también fuera de la final en la segunda, Eguibar se tomó la tercera parada del circuito, esta de Cervinia, como un punto de inflexión. Como un trampolín que le aupó al primer podio de la temporada. "Estoy muy contento y muy emocionado porque ha sido un verano muy largo con unos problemas de espalda que incluso me hicieron plantearme dejarlo porque no veía que mejoraba; pero estamos aquí y estoy muy feliz de haber continuado", explicó el propio Eguibar.
Sin embargo, fiel a su naturaleza competitiva y a su carácter inconformista, el donostiarra se marchó de la estación italiana con un sabor agridulce. Con una medalla al cuello, pero con la certeza de que podía haber sido de un color más brillante. Más dorado. "Sé que se me ha escapado la victoria por errores que he hecho pero bueno, toca seguir trabajando. No queda otra. Ahora a disfrutar de las navidades y volver tras ellas más fuerte", continuó Eguibar. De hecho, en Cervinia, el de Basque Team mostró todas sus caras: la buena y la menos buena. Así pues, en la clasificatoria el vasco dio un puñetazo en la mesa al conseguir el mejor tiempo de la competición. Reveló por qué es el actual campeón del mundo. Fue primero en octavos y primero en cuartos. Sin embargo, una mala salida en la semifinal le relegó al cuarto puesto. Pero entonces Eguibar tiró de paciencia y aguardó al error de uno de sus rivales para seguir con vida. La espera tuvo su recompensa con el choque del austríaco Alessandro Hammerle y del japonés Yoshiki Takahara, que besaron la nieve y catapultaron al donostiarra hasta la final. Allí, en la pugna por los metales, el también austríaco Jakob Dusek no dio opción a sus rivales y se llevó el oro con una soberbia actuación. Así pues, Eguibar se jugó el segundo puesto con el canadiense Eliot Grondin, quien terminó por morder la plata imponiendo un ritmo increíble.
De esta forma, Eguibar se colgó un bronce que pudo ser mejor; pero a pesar de ello, el donostiarra es consciente de que esta medalla le da alas. Buenas sensaciones para soñar con hacer algo grande en los Juegos Olímpicos de Invierno. "Hacer esto a menos de dos meses para los Juegos sinceramente sube la moral de cualquiera. Ya sabíamos que podíamos estar ahí delante, que podíamos estar con los mejores; pero lograrlo nos ayuda a intentar seguir mejorando. Así que ahora a entrenar en navidades y a estar centrando en los Juegos, que queda poco y quiero estar ahí", afirmó. Y es que una medalla olímpica es de lo poco que le queda por conseguir a Eguibar. De lo poco que le queda para completar un palmarés envidiable para alguien de su edad. En 2015 fue el justo propietario del Globo de Cristal, trofeo que se le otorga al campeón de la Copa del Mundo; y tras dos medallas de plata en el Mundial de 2017, este 2021 por fin logró erigirse con la de oro.
camino complicado
Así, Eguibar no oculta que son los Juegos el principal objetivo de la temporada. Una temporada que no comenzó del todo bien para el donostiarra, puesto que terminó la primera prueba del circuito en la vigésimo segunda posición. Una plaza que se le quedó enquistada ya que fue lograda en Secret Garden, la pista china en la que precisamente se disputará la cita olímpica el próximo febrero. La segunda prueba, en Montafon (Austria), tampoco pudo clasificarse para las finales; por lo que el de Basque Team tiene en el bronce de Cervinia el mejor resultado del curso. Con todo, oportunidades tendrá de mejorar sus cifras antes de los Juegos de Invierno puesto que tras las Navidades llegarán las citas de Krasnoyarsk (Rusia), del 7 al 9 de enero, Valmalenco (Italia), 21 y 22 de enero; y Cortina d'Ampezzo (Italia), 28 y 29 de enero.
"Hacer esto a menos de dos meses para los Juegos sube la moral de cualquiera"
"Se me ha escapado la victoria por errores propios, pero estoy muy contento y emocionado"
Lucas Eguibar
Campeón del mundo de snowboard