El sueño sigue vivo para el Amorebieta

Después de un breve, pero dulce respiro competitivo motivado por el parón navideño, el Amorebieta retomó ayer domingo los entrenamientos. Lo hizo, eso sí, de manera individualizada en sesión matinal a la espera de conocer los resultados de las pruebas PCR a las que se sometieron los jugadores y resto de personal de un equipo que volverá el viernes a la acción en LaLiga SmartBank para desafiar al Burgos a domicilio y arrancar así la segunda vuelta de un campeonato en el que, a cuatro puntos de los puestos de permanencia, los azules asoman más vivos que nunca. Pagado el peaje del novato en la categoría, el conjunto zornotzarra ha marcado una trayectoria ascendente desde el inicio de un curso que exigió al máximo al colectivo desde la jornada inaugural. El estreno, sin ir más lejos, tuvo lugar en una de las plazas a priori más complicadas, pues los vizcainos visitaron Montilivi para hacer frente a un Girona que venía de disputar la final del play-off de ascenso a Primera División en las dos campañas anteriores.

No pudieron rascar punto alguno los de Iñigo Vélez de Mendizabal en un encuentro en el que los catalanes aprovecharon dos chispazos para tumbar a los azules, que volvieron a morder el polvo en la visita al Mirandés nueve días después. Sendos goles de Iñigo Vicente e Imanol García, cedidos ambos por el Athletic, obligaron a hincar la rodilla de nuevo a un equipo que, a pesar de ofrecer una buena imagen en términos generales, pagó caro su falta de aplomo. Con cero puntos en el casillero sobre seis posibles, había que dar un primer paso al frente y el Amorebieta lo dio un 29 de agosto de 2021 que forma ya parte de la historia del club. Fue entonces, no en vano, cuando los zornotzarras debutaron como locales en Lezama en LaLiga Smartabank con el imponente Almería como rival, que cayó derrotado, remontada incluida, por un inolvidable 2-1 con goles de Iker Bilbao y Koldo Obieta.

La alegría fue máxima para el vestuario, así como para una afición que ha sufrido y disfrutado a partes iguales en cada compromiso en casa de un Amorebieta que, ante la imposibilidad de fajarse en Urritxe, hizo de las instalaciones del Athletic su particular fortín al sumar otros tres partidos como invicto gracias a los empates firmados ante Burgos, Eibar y Sporting de Gijón. El primer tropiezo como local no llegó hasta el 16 de octubre, en la décima jornada, contra un punzante Cartagena que se impuso 2-3. El filial de la Real Sociedad, una semana después, repitió fortuna al vencer 1-2 a un Amorebieta que, instalado ya en la zona roja de la clasificación, enlazó diez jornadas seguidas sin conocer la victoria hasta el balsámico choque que albergó Lezama frente al Valladolid.

Con la imperiosa y creciente necesidad de volver a ganar, los azules dieron el segundo paso adelante del curso al someter a los pucelanos por un incontestable 4-1 que pareció rearmar de confianza al grupo, si bien los resultados volvieron a resultar tortuosos en los tres siguientes encuentros. Las tablas cedidas sobre la bocina contra el colista Alcorcón a domicilio, unido a sendas derrotas sin paliativos a manos del Lugo en Lezama y del Oviedo en el Carlos Tartiere devolvieron las dudas a una caseta que, sin embargo, encajó con entereza el rapapolvo público de Vélez de Mendizabal para volver a levantarse.

Tanto es así que desde la visita liguera al Oviedo el pasado 20 de noviembre el Amorebieta no ha vuelto a conocer la derrota. Cayó eliminado ante el Almería en el esperado regreso a Urritxe en la segunda ronda de Copa, pero en LaLiga SmartBank acumula cuatro jornadas consecutivas sumando gracias a la primera victoria de la temporada a domicilio en Málaga y a tres nuevos empates frente a Zaragoza, Unión Deportiva Las Palmas y Ponferradina.

NOMBRES PROPIOS

Cuatro goles en los tres últimos envites en liga suma un iluminado Gorka Guruzeta, máximo artillero de un equipo en el que han visto portería otros diez jugadores, siendo Koldo Obieta y un determinante Larrazabal, con cuatro asistencias en su haber, los siguientes máximos goleadores con tres dianas cada uno. La plantilla al completo, asimismo, ha contado con minutos en el desarrollo de un ejercicio en el que el entrenador azul no ha repetido alineación de una jornada a otra y en el cual uno de los principales quebraderos de cabeza ha sido la portería.

La latosa lesión en un hombro de Roberto Santamaría en Tenerife en la novena jornada dio las llaves de la titularidad a Mikel Saizar, relegado después al banquillo en favor de Unai Marino, quien se mantiene a día de hoy como titular en un Amorebieta que afronta con optimismo la segunda vuelta de LaLiga SmartBank tras completar su proceso de adaptación a la categoría. Décimo equipo más goleador del campeonato con 24 tantos a favor en 21 partidos, los 31 goles encajados se presentan como uno de los debes a corregir al haber solo dos equipos más goleados que los azules, en la senda correcta aun así para opositar con fuerza a una permanencia que, lejos de resultar una quimera, se antoja posible en caso de mantener la trayectoria ascendente marcada en la primera vuelta de una liga que se relanza el viernes.