El Tribunal Supremo ha avalado la sentencia del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) y confirma la anulación del ERE para 83 trabajadores de las plantas de PCB en Barakaldo y Sestao, del grupo ITP. El fallo es relevante, más allá de la clarificación de la situación laboral de los afectados, porque el alto tribunal deja sentadas las bases de cómo interpretará los despidos colectivos producidos en tiempos de pandemia.
En una sentencia avanzada por ELA, el Supremo confirma el criterio anterior del TSJPV de anular los despidos argumentando que la empresa no había demostrado suficientemente la situación económica negativa previa al covid.
Hay que recordar que el Gobierno de Pedro Sánchez cerró la puerta a los despidos durante la pandemia forzando a las empresas a acogerse a medidas alternativas como los ERTE bonificados, de manera que la defensa del ERE por parte de ITP ha pivotado en torno a la situación negativa que tenía PCB antes de marzo de 2020.
Con un voto particular en contra, el TSJPV ya había anulado el ERE de estos trabajadores, que en todo caso vienen realizando movilizaciones para forzar su vuelta al trabajo a la espera del resultado del recurso. Ahora el Supremo les vuelve a dar la razón y rechaza de nuevo los argumentos de la empresa, confirmando una lectura jurídica que se acerca mucho a que las empresas tenían prácticamente prohibido despedir en la pandemia.
La empresa ITP manifiesta su disconformidad con la sentencia pero deja claro que la cumplirá, y asegura que la nulidad del ERE agrava la situación económica y financiera de PCB.