Polideportivo

El Surne Bilbao Basket se sobrepone a la difícil vida sin Jeff Withey

Ha firmado un más que correcto balance de 4-6 sin el pívot, el jugador de la ACB con mayor influencia en los resultados de su equipo según la estadística avanzada
Jeff Withey, en el encuentro de la primera vuelta contra el Gran Canaria.

Las lesiones están obligando este curso a Jaume Ponsarnau a profundizar en su capacidad de gestión de recursos, a tener que cambiar y readaptar planes sobre la marcha. Los problemas físicos en el Surne Bilbao Basket han sido constantes pero se han focalizado sobre todo en la pretemporada, obligando a variar la hoja de ruta tras perder al jugador que estaba llamado a ser el principal puntal ofensivo del equipo, Andrew Goudelock, además de a Tomeu Rigo, y en este tramo final de ejercicio, en el que los hombres de negro están teniendo que competir sin Jeff Withey, Ludde Hakanson y Francis Alonso, otras tres piezas de enorme importancia en la pizarra del técnico catalán.

La ausencia del pívot estadounidense, que durante el parón competitivo de febrero sufrió durante un entrenamiento un esguince moderado a nivel de ligamento lateral externo del tobillo izquierdo así como una fractura de la base del quinto metatarsiano, fue suplida prácticamente de inmediato por Georgios Tsalmpouris, un interior de características prácticamente opuestas a las suyas que está ofreciendo un rendimiento algo irregular pero correcto. Withey volvió a vestirse de corto la pasada jornada, pero no saltó a cancha durante el encuentro ante el Baxi Manresa saldado con triunfo. Su reaparición podría producirse esté sábado en la cancha del Betis.

Durante estos últimos diez partidos, el conjunto vizcaino ha tenido que acostumbrarse a la difícil vida sin Withey. En el momento de su lesión, los de Ponsarnau ocupaban la 11ª posición en la tabla con nueve victorias y once derrotas, la misma plaza en la que se encuentran a día de hoy tras haber registrado un balance de 4-6 durante su ausencia, algo que habla muy bien de la manera en la que los hombres de negro han disimulado su ausencia pese a dejar de contar con recursos de su perfil. Porque Withey no es un jugador cualquiera, ni dentro de la estructura del Surne Bilbao Basket ni en la globalidad del ecosistema de la Liga Endesa.

La estadística avanzada recogida en la web rincondelmanager.com apunta que es, con mucha diferencia, el jugador más destacado de la competición en el epígrafe de influencia, que mide el impacto que tiene la presencia del jugador sobre el resultado de los partidos cada 40 minutos (la fórmula utilizada es: +/- cada 40 minutos con el jugador en pista restándole el +/- cada 40 minutos con el jugador fuera de la misma). Lo era cuando se lesionó y lo sigue siendo actualmente. En el mencionado apartado estadístico luce una valoración de 19,2, mientras que el segundo y el tercero -Aaron Doornekamp (Lenovo Tenerife) y Chris Jones (Valencia Basket)- se quedan en 15,1. La diferencia es llamativa en lo global y también en lo referente al propio equipo vizcaino, pues el siguiente hombre de negro en el ranking es Adam Smith, 43º con 6,6, con el resto de jugadores por debajo de 1 o directamente en guarismos negativos.

EFICIENCIA DEFENSIVA

Withey es de esos jugadores que muchas veces se ven perjudicados por su lenguaje corporal en cancha, de los que parece que están jugando a medio gas pero que al acabar el partido en cuestión lucen estadísticas destacadísimas y acaban teniendo una importancia brutal en el resultado final. También en lo malo, pero sobre todo en lo bueno. Tercer mejor reboteador de la ACB (6,8 capturas por cita) siendo el que menos minutos de media juega entre los trece primeros y cuarto en tapones (1,3), su importancia en funciones de retaguardia es también extraordinaria, pues se trata del tercer mejor jugador de la competición, por detrás de Sertaç Sanli (Barça) y Leandro Bolmaro (Tenerife), en lo que respecta a eficiencia de tiro rival -número de puntos que anota el contrincante por cada tiro de campo lanzado cuando el jugador está en pista-, con 0,91. También brilla en el porcentaje de rebotes totales -% de rechaces capturados de todos los disponibles mientras el jugador está en pista- al ser tercero con el 18% (igualado con Tyson Pérez e Ethan Happ, los dos primeros). Todo ello le convierte en el líder de la competición en eficiencia defensiva -puntos recibidos por el equipo cada 100 posesiones cuando el jugador está en pista- junto a Aaron Doornekamp, con 95,5.

Su regreso a la actividad puede proporcionar un impulso importante al Surne Bilbao Basket en su pugna final por conquistar plazas europeas, aunque Ponsarnau ya ha avisado de que en el plazo más inmediato será difícil que pueda recuperar un rol principal.

03/05/2023