Bizkaia

El Teatro Campos acoge la gala ‘Bilbao con las personas mayores’

El Teatro Campos acoge la gala ‘Bilbao con las personas mayores’

EL duque François de La Rochefoucauld fue cruel cuando dijo aquello de que la vejez es un tirano que prohíbe, bajo pena de muerte, todos los placeres de la juventud. Cruel y no certero del todo. No en vano, envejecer es todavía el único remedio que se ha encontrado para vivir mucho tiempo, Y no conviene olvidar las enseñanzas que nos han dejado en el camino quienes más caudal de experiencias acumulan. Viene al caso toda esta reflexión, habida cuenta que el Teatro Campos Elíseos fue ayer el escenario de la gala Bilbao con las peronas mayores, que se engloba en la conmemoración del 1 de octubre, Día Internacional de las Personas Mayores. Las riendas del encuentro fueron manejadas por Joseba Solozabal y Agurtzane Bilbao y la ceremonia, cuyo cénit se alcanzó con la entrega de los premios a María Victoria del Bado, Isabel Osorio y Miguel Ángel Fernandino, todo ello jaleado con las animaciones de Gurutze Beitia y las bilbainadas de Bilbao Mapamundi.

Fue el alcalde, Juan Mari Aburto, quien proclamó, una vez más, a Bilbao como ciudad amigable con los mayores, acompañado por la ocasión por los concejales de Acción Social Iñigo Zubizarreta y Juan Ibarretxe. Conviene ese pacto de amistad del que les hablo. No por nada, las personas mayores desempeñan una función esencial en la vida de nuestras comunidades; desarrollan labores profesionales remuneradas, colaboran como voluntarias en diferentes proyectos sociales, transmiten experiencia y conocimientos, ayudan a sus familias, son personas muy vinculadas a sus entornos residenciales... Pero la sociedad solo se puede beneficiar de esas valiosas aportaciones, si las personas mayores gozan de una buena salud y existen oportunidades que permiten su plena participación social. Solo entonces reparten sonrisas y abrazos entre todas las edades.

Digamos que a la cita de ayer, donde la gratitud corrió a raudales, se sumaron con buena voluntad y una sonrisa bien puesta gente como Yolanda Díaz, Nekane Alonso, Roberto Martínez, Itziar Urtasun, Lucía Merino, José Ramón Landaluce, Itziar Fernández, Diana Vento, Alberto González, Ana Viñals, Montserrat Villayanche, Felisa Hernández, Chelo Landaluce, Oliva Coedo, Conchi Blanco, María Jesús Elorriaga, Begoña Elosegi; hombres y mujeres ligados a proyectos como Zaintzeda, Aukeragune o Mirada Activa Berria; Vicente Valdivieso, Luis Urquijo, José Ramón García, Pilar Ortega, Charo Andoain, Encarnación Fernández, Gloria Ruiz, Joseba Aranguren, María Teresa Gorriz, Aintzane Martín, Marijo García, María Luisa Olabarria, Gonzalo Mendizabal, Miren Urrutia, Maite Bengoa, Marisa Agirre, Yolanda Zarate, Begoña Igartua, María Ángeles Fernández, Isabel Orrantia, Álvaro Martínez, José Luis Fernández, Unai Palacios, Andoni Barrios y así hasta poblar, hasta los topes, el patio de butacas del Teatro Campos Elíseos. Son hombres y mujeres inasequibles al desaliento, gente mayor que mantiene en pie su ilusión, la mayor de las fuerzas.

30/09/2022