El techo y la ilusión de Osasuna en la Copa

Osasuna dio el pasado miércoles en Arnedo otro paso en su intento de colmar los deseos del presidente del club, Luis Sabalza, que en fechas recientes verbalizó su ilusión deportiva para el presente ejercicio. “Tengo una gran ilusión: jugar la semifinal de Copa”, dijo. Y eso es mucho para el conjunto rojillo, sobre todo en épocas recientes, ya que con Jagoba Arrasate en el banquillo su techo en la competición del KO son los octavos de final, ronda a la que accederá el cuadro navarro si supera su próxima eliminatoria, la de dieciseisavos, fijada para los días 3, 4 y 5 de enero y en la que se enfrentará a un rival que conocerá en el sorteo que se celebra hoy a las 12.30 horas en Las Rozas.

También avanza Osasuna hacia el objetivo que se fijó Arrasate antes de iniciar su concurso en la presente edición de la Copa, que consiste en traer un partido de la competición a El Sadar, algo que no ocurre desde la temporada 2018-2019, la primera del vizcaíno como entrenador del equipo navarro. Por aquel entonces estaban los rojillos en Segunda División y el sorteo de la segunda ronda les emparejó con un adversario de su misma categoría, el Reus, que ganó en Pamplona (1-2) un par de meses antes de ser expulsado de todas las competiciones por impagos del club a sus jugadores.

Aquella eliminatoria, a partido único, se disputó en El Sadar porque, a pesar de compartir categoría, la papeleta de Osasuna salió del bombo antes que la del Reus, determinando que el encuentro se jugara en la capital navarra. Y después de aquello, no ha vuelto la Copa a El Sadar. En la campaña 2019-2020, Osasuna, ya en Primera, apeó a domicilio a Lorca (0-3), Haro (1-2) y Recreativo de Huelva (2-3 en la prórroga), todos de inferior categoría, para caer 3-1 en los octavos de final en Donostia (la papeleta de la Real salió antes que la de Osasuna). En la siguiente, la 2020-2021, los rojillos pudieron como visitantes con Tomares (0-6), Olot (0-3) y Espanyol (0-2), para perder en los penaltis en Almería ante un rival de Segunda con el que empató sin goles. Y el curso pasado, el Girona, todavía en Segunda, descabalgó a los rojillos en dieciseisavos (1-0). Por eso, los octavos son el techo con Arrasate; y la semifinal, que Osasuna ha catado en cinco ocasiones (1935, 1936, 1988, 2003 y 2005), la ilusión del presidente.

SIN MOI GÓMEZ NI LOS MUNDIALISTAS

• El entrenamiento. Osasuna completó ayer jueves en Tajonar su último entrenamiento de la semana horas después de su victoria copera en Arnedo (1-3) y antes de los tres días de fiesta que va a tener la plantilla para disfrutar de Nochebuena y Navidad. La de Moi Gómez, que se perdió el partido en El Sendero por culpa de una indisposición, fue la única ausencia, amén de las de los mundialistas Budimir y Abde, en una sesión en la que los titulares en Copa tuvieron una menor carga de trabajo que el resto de futbolistas de la primera plantilla, que se ejercitó a mayor intensidad a las órdenes de Arrasate. Saverio, sin ficha tras haber salido de una grave lesión, y Herrando, central del Promesas, se entrenaron también con el primer equipo. Los rojillos guardan descanso hasta el próximo lunes, 26 de diciembre, fecha en la que comenzarán a preparar su visita liguera a la Real Sociedad del sábado 31 de diciembre a las 16.15 horas.