Un ictus te cambia la vida. Lo saben bien las miles de personas que cada año lo padecen en Euskadi. La sangre deja de llegar al cerebro y lo hace de forma súbita bien por una obstrucción en la arteria o bien porque esta se rompe. El caso es que de repente podemos notar que no podemos hablar o mover un brazo o no vemos. Es simple. "La sangre no llega donde debe", explica el doctor Alfredo Rodríguez Antigüedad que ha destacado que aunque nadie está libre de sufrirlo sí hay dolencias o patologías que pueden provocarlo. A la vez pide poner atención a los hábitos de vida que a menudo no son todo lo saludables que deberían.
En este podcast nos explica cómo actuar si sufrimos un ictus y lo fundamental es acudir cuanto antes a urgencias ante un síntoma como los anteriormente descritos. El tiempo es oro y con el ictus todavía más porque en el cerebro el tejido no se regenera. "Cerebro perdido, cerebro que no recuperamos".
Después toca una rehabilitación que dependiendo del caso puede ser más o menos larga. El habla es una de las facultades que puede resultar más afectada. La buena noticia, afirma el presidente del Colegio de Logopedas del País Vasco, Unai Pequeño, es que el porcentaje de recuperación en este área suele ser bueno si bien dura aproximadamente unos 12 meses.