El Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha impuesto este miércoles una multa de un millón de euros diario a Polonia por incumplir una sentencia europea anterior que le obliga a suspender el régimen disciplinario que impone a los jueces del país y que la UE considera una amenaza para la independencia judicial en Polonia.
El pasado julio, el Tribunal europeo dictó la suspensión cautelar de la controvertida corte disciplinaria del Tribunal Supremo polaco pero las autoridades nacionales ignoraron el fallo, razón por la que la Comisión Europea volvió a denunciar el caso y reclamó una sanción financiera.
El auto del vicepresidente del TJUE recuerda que las medidas provisionales dictadas el 14 de julio deben ser respetadas para evitar un daño "grave e irreparable" al orden jurídico de la Unión Europea y a los valores que cimientan la Unión, "en particular el Estado de derecho".
La sanción diaria se aplicará a partir de la notificación del auto de este jueves y hasta que el Estado miembro cumpla con las medidas cautelares dictadas en julio o hasta que el Tribunal con sede en Luxemburgo dicte sentencia definitiva sobre el caso abierto.
El caso se remonta a abril de este año, cuando la Comisión Europea acudió a la Justicia europea para denunciar la reforma del sistema judicial en Polonia de febrero de 2020 --que incluye la creación en el Supremo de una sala disciplinar y una reorganización de la judicatura--, al considerar que viola las leyes de la Unión Europea.
Varsovia mantiene desde hace tiempo que trabaja en una nueva reforma para antes de que acabe el año y que entre los cambios figura la supresión del régimen disciplinario denunciado por Bruselas. Sin embargo el pulso entre el Gobierno polaco y las instituciones de la UE se tensó aún más cuando el Tribunal Constitucional polaco puso en duda la primacía del Derecho europeo.
Es en este contexto y ante la falta de avances que el Ejecutivo comunitario recurrió de nuevo al Tribunal europeo en septiembre para reclamar una multa diaria suficientemente elevada como para convencer al Estado miembro de cumplir las medidas cautelares.
En su auto de este miércoles, el vicepresidente del Tribunal europeo considera necesario "reforzar" las medidas provisionales dictadas en julio con una sanción económica diaria para disuadir a Polonia de que persista con el retraso de la suspensión del régimen disciplinario.
La "intención de anular, de aquí a un año, una serie de medidas" destinadas a reformar el sistema judicial polaco no supone "evitar, a falta de medidas inmediatas", el perjuicio "grave e irreparable" al orden jurídico de la UE, según el auto.
UN "CHANTAJE" DE LA UE
El Gobierno de Polonia ha acusado al Tribunal de Justicia de la Unión Europea de excederse en sus competencias y ha asegurado que la multa de un millón de euros por día impuesta este miércoles es un "chantaje", término que Varsovia ya venía utilizando en sus críticas recurrentes a la actuación de Bruselas.
"Es la siguiente fase de la operación para que Polonia no tenga tanta influencia en el sistema de nuestro país, es usurpación y es chantaje", ha proclamado el viceministro de Justicia, Sebastian Kaleta, a través de su cuenta de Twitter, en la primera reacción de un miembro del Gobierno de Mateusz Morawiecki.
Según Kaleta, el TJUE "actúa al margen de sus competencias" y "abusa" de la imposición de multas y medidas cautelares, en alusión al proceso en ciernes y que viene motivado desde la Comisión Europea, que ha cuestionado algunas reformas impulsadas por el Gobierno polaco por su supuesta falta de respeto al Estado de Derecho.
El propio Morawiecki se pronuncio la semana pasada con dureza y habló varias veces de "chantaje", tanto ante el Parlamento Europeo como durante la cumbre de líderes que se celebró el jueves y el viernes en Bruselas. El primer ministro también lamentó el lunes en una entrevista al 'Financial Times' el retraso en la aprobación de los fondos de recuperación, advirtiendo incluso de que la Comisión Europea podría desatar la "tercera guerra mundial".