El trabajador natural y vecino de Ablitas fallecido este viernes en un accidente laboral, Roberto Cermeño Arriazu, de 40 años, era el menor de dos hermanos de una familia arraigada en la localidad ribera. Sus padres, Luis y Consuelo, y su hermano mayor César, están afincados en Ablitas, al igual que lo estaba él.
Se encontraba soltero y, aunque intentó cambiar el sector de la construcción por trabajo en una fábrica, acabó regresando a trabajar en la construcción, donde había desarrollado casi toda su vida laboral.
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El alcalde de Ablitas, Carlos Bonel, ha lamentado este viernes el trágico fallecimiento del trabajador en el accidente laboral ocurrido en Tarazona. "Roberto era una persona muy querida en el pueblo, muy entrañable. Sentimos mucho su muerte", ha manifestado el primer edil. El funeral se celebrará este próximo domingo a las 10.30 horas en la parroquia Santa María Magdalena.
La Guardia Civil investiga las circunstancias en las que el vecino de Ablitas se precipitó este viernes por la mañana desde la cubierta de un edificio en la que realizaba tareas de remate de la fachada. El trabajador cayó desde una altura de 10 metros y murió en el lugar.