El tranvía ya recorre el barrio de Salburua. Lo hace todavía sin usuarios dentro del primer día de pruebas para verificar la correcta circulación de los vagones por los raíles y a la par del remate de las últimas obras del nuevo ramal. Un periodo de ensayos que se extenderá durante los dos próximos meses con el objetivo de que el metro ligero ya esté completamente operativo para los viajeros con el inicio de la primavera, a mediados del próximo mes de abril.
El arranque de los convoyes ha sido un momento esperado por los vecinos de los barrios de Salburua, Santa Lucía y Desamparadas, tras más de dos años de obras en sus calles y con "la expectación" de ver el acomodo del nuevo medio de transporte a su cotidianidad diaria.
Correcta circulación
Lento, a 5 kilómetros por hora, pero seguro en su primer viaje por el nuevo ramal, el tranvía ha tardado más de una hora para discurrir el primer tramo, desde la calle Florida hasta la parada en el Paseo de la Ilíada, frente al centro cívico de Salburua; mientras diversos operarios trabajaban a la par en acondicionar el nuevo espacio verde de su recorrido y rematar diferentes trabajos, como colocar las últimas baldosas en la parada de la Ilíada.
Serán días de puesta a punto para retirar el vallado que todavía cierra el carril bici, acondicionar las nuevas zonas verdes o pavimentar los espacios adyacentes. Remates finales, ya que los trabajos principales ya están finalizados como la catenaria, raíles, marquesinas y paradas.
Los primeros ensayos se centran en los gálibos para verificar la correcta y fluida circulación de los trenes por las vías. Posteriormente, le seguirán las pruebas de señalización viaria, claves para su adaptación al medio y, sobre todo, al resto de sistemas de transporte que ya circulan por algunas zonas de su recorrido como el BEI, el tráfico privado y las bicicletas y patinetes eléctricos.
A mediados de febrero, comenzará la formación de los conductores por el nuevo trazado y en marzo, el metro ligero ya recorrerá el ramal a mayor velocidad, pero todavía sin viajeros.
"Había ya ganas"
El metro ligero ha acaparado la atención de los vecinos del barrio en su puesta en marcha, "contentos" por comprobar que el proyecto llega a su fin, después de años afectados por obras que "han puesto patas arriba" al barrio y "expectantes" por ver cómo se acopla el nuevo medio de transporte a su entorno y sus posibles afecciones a esta zona de la capital alavesa.
"Sí, ya lo he visto pasar. Iba poquito a poco, poquito a poco", ha comentado Ángel, vecino de la Avenida de Praga, quien ha explicado que "ya había ganas" de verlo circular, aunque sea en pruebas, por el barrio. Y es que "han sido más de dos años de obras" que han condicionado la vida diaria de unos vecinos, ansiosos por que todo vuelva "a la normalidad".
Mari José, de Desamparadas, también ha esperado a ver los primeros metros del convoy al salir de la panadería de la calle Florida. "Es un paso adelante para la ciudad y muy bueno para muchos vecinos, sobre todo de Salburua", que dispondrán de un nuevo transporte público que "mejorará la conexión" con el resto de la ciudad.