Es evidente que lavar y secar la ropa resulta mucho más complicado en los meses de invierno que en los de verano. Si no tienes secadora en casa, bien por motivos económicos o por limitaciones de espacio, lo cierto es que durante los meses fríos el tema de la colada se puede eternizar y desde que lavas la ropa hasta que la recoges pueden pasar varios días.
Secar la ropa dentro de casa, aunque es más rápido, no resulta muy adecuado, puesto que la humedad que desprende se acabará acumulando en el ambiente y creará un entorno poco saludable que puede derivar en problemas de salud, como infecciones pulmonares, o en la aparición de hongos y moho. En este caso, deberías utilizar un deshumidificador que, además de retirar el exceso de humedad, acelerará el secado de las prendas.
Aunque tengas la posibilidad de tender al aire libre, a veces tampoco es una buena solución. Pasarán las horas y la ropa seguirá igual de mojada que cuando la sacaste de la lavadora, o más incluso si no la tienes a cubierto y entre tanto le pilla algún chaparrón.
Agitar enérgicamente la ropa cuando vayas a colgarla te permitirá eliminar el exceso de agua. Darle de vez en cuando la vuelta en el tendedero, además de prevenir que se hagan pliegues que retrasen el secado de la prenda, hará que se seque de manera más uniforme.
Colgar las prendas en perchas, evitar amontonarlas en el tendedor o colocar entre medio de ellas toallas secas para que absorban la humedad son otras prácticas para acelerar el secado.
El truco de la toalla
Las redes sociales una vez más nos brindan una solución cuando menos curiosa. En este caso, la usuaria de TikTok @fevashogar ha desvelado una original forma de secar la ropa de una forma fácil, sencilla y muy barata y sin necesidad de secadora. Este truco viral nos ahorrará tiempo, esfuerzo y dinero y la clave está simplemente en la propia lavadora y en una toalla seca.
La influencer propone sacar la mitad de la ropa fuera de la lavadora una vez que haya terminado el proceso de lavado y centrifugado. A continuación, debes poner en el tambor, sobre la ropa que ha quedado en él, una toalla grande y seca. Vuelve a meter la ropa mojada encima de ella y envuélvela con la propia toalla. Pon de nuevo en marcha la lavadora en el programa de centrifugado y la toalla absorberá la humedad de las prendas. Cuando la saques, tu ropa estará prácticamente seca, así que cuélgala en algún lugar seco y en pocos minutos la tendrás lista para ponértela o recogerla en el armario.
Consejos para tender en interior
1- Elige el tendedero que más te convenga. Los tendedores móviles y plegables son ideales si tienes poco espacio.
2- Opta por un tendedero eléctrico. Tiene la misma forma que un tendedor de alas tradicional con la ventaja de que desprende calor para ayudar a secar la ropa rápidamente.
3- Centrifuga la ropa en la lavadora. Utilizar el centrifugado más adecuado para tus prendas te hará sacarlas de la lavadora menos húmedas y se secarán mucho antes.
4- Aprovecha el calor de los radiadores. Coloca las prendas cerca de ellos, pero nunca encima, ya que podrían estropearse, deformarse, encoger e incluso salirles manchas por la humedad.
5- Ventila la habitación. Mantener la ventana abierta evitará que la humedad se concentre en la habitación y, además, el aire que entre hará que la ropa se seque más rápido.
6- Pon más lavadoras con menos ropa. Si tienes poco espacio para tender, la opción es lavar más a menudo. La ropa se secará más rápido y habrá menos humedad en el ambiente.
7- Tiende la ropa en perchas en la barra del baño. Colocar la ropa en perchas colgadas en la barra de la bañera o de la ducha hará que tus prendas se sequen más rápido con el calor del ambiente.
8- Tiende cuando no vayas a estar en casa. Procura no poner a secar la ropa dentro de la vivienda por la noche y nunca coloques el tendedero en habitaciones habitadas.