El videoarbitraje va camino de desesperar al Amorebieta, que no acumula buenas experiencias con la tecnología en las trece primeras jornadas de LaLiga SmartBank. En la visita al Alcoraz, donde los azules sumaron un valioso punto tras hacer méritos suficientes para adjudicarse la victoria, fueron dos las acciones que hicieron que más de uno se llevara las manos a la cabeza. La primera fue con motivo del gol en propia puerta de Oier Luengo, revisado por el VAR por un posible fuera de juego en el origen de la jugada, anulado instantes después por el colegiado Quintero González después de ponerse en contacto con la sala VOR y, para estupor generalizado, concedido finalmente por el propio trencilla andaluz tras corregirse a sí mismo para indicar el centro del campo.
Se quedaron desconcertados los pupilos de Iñigo Vélez de Mendizabal, quien entró en cólera minutos después al ver cómo un derribo del central Jorge Pulido sobre Iñigo Orozko dentro del área local ni siquiera era revisado en el monitor por el árbitro andaluz, que resolvió el caso con cartulinas amarillas para el técnico gasteiztarra y un enfurecido Mikel Saizar. "El tema del VAR me está dejando alucinado. Casualidad, pero nos están pasando cosas muy raras con él", lanzó tras el choque Iñigo Vélez. Y no le falta razón. Basta con acudir a la videoteca.
casos flagrantes
Tres claros ejemplos. En el derbi ante el Eibar que albergó Lezama, Iglesias Villanueva dejó al Amorebieta con un jugador menos en el minuto 78 al mostrar una polémica segunda tarjeta amarilla a Luengo tras establecer contacto con la sala VOR, pues inicialmente había equivocado la identidad del jugador zornotzarra amonestando y expulsando a Gorka Larrucea. Un despropósito que dejó alucinado a Vélez de Mendizabal, pues la falta en cuestión fue de lo más común. En la visita al Tenerife, por otra parte, el colegiado señaló un controvertido penalti a favor del cuadro canario tras revisarlo en el monitor, mientras que en Fuenlabrada unas claras manos en el área local pasaron desapercibidas para el VAR, lo que indignó a Mikel San José, quien compartió la imagen a través de las redes sociales y lamentó que "el árbitro no acudió a revisar esta jugada. Por favor, que alguien me explique por qué. Es evidente que el de azul no es el portero".
El miércoles, contra el Valladolid en Lezama, el Amorebieta y el VAR vuelven a cruzarse. La expectación crece, si bien es para lamento de un equipo que promete levantarse una y mil veces.