El vídeo viral del árbitro que marca un gol sin querer y lo da por válido

En los campos de fútbol se puede ver de todo, incluso centrándonos solo en lo que pasa sobre el terreno de juego. Desde saltos de espontáneos a celebraciones curiosas, pedidas de mano, aparición de animales o invasiones de campo. Y en lo puramente deportivo, se han visto cosas insólitas y decisiones arbitrales incomprensibles, aunque muchas de ellas, las más graves, ahora se revisan en el VAR, que suele corregir errores de los colegiados, aunque no siempre, e incluso los puede empeorar.

Vídeo viral... de 2019

Pero el VAR es cosa de ricos, y a las categorías inferiores no llega. En ellas arbitran colegiados no profesionales, a los que no se les puede exigir el mismo rigor, y luego pasa lo que pasa, como lo que se puede ver en un vídeo viral en los últimos días en diversas redes sociales, aunque realmente sucedió en 2019.

Se jugaba un partido por el ascenso en la tercera división de Países Bajos, en el estadio De Bosk, en la localidad de Harkema. Los locales, Harkemase Boys, habían comenzado muy bien el partido y vencían por 3-0 al HSV Hoek, pero el encuentro se empezó a complicar un poco al anotar los visitantes su primer gol: 3-1.

Gol del árbitro

Pero ahí llegó la jugada insólita. En una acción embarullada, un jugador visitante disparó a puerta, el balón pasó entre las piernas del portero, pero rozó en ellas, con lo que el guardameta pudo reaccionar y correr hacia la portería para despejarlo antes de que cruzara la línea de gol. El árbitro, Maurice Paarhuis, se situó dentro del área pequeña para ver mejor, lo que resultaría definitivo. Porque el rechace le llegó a otro jugador visitante, que hizo un centro-chut que parece que dio en el poste y salió rebotado hacia el árbitro, a quien le golpeó en la pierna (hay quien ve un gesto incluso como si rematara) y el balón se coló entre varios futbolistas que se encontraban sobre la línea de gol.

Para sorpresa de todos, el árbitro concedió el tanto visitante, que no tenía que haber subido al marcador, ni tampoco el colegiado debería haber estado ahí, en la trayectoria de la jugada. Ni los locales ni el público se creían que hubiera dado gol, pero lo hizo, e incluso en las imágenes de televisión le adjudican el gol al árbitro.

Por suerte para él, su decisión no resultó finalmente definitiva, ya que en los instantes finales el equipo local sentenció el partido con el 4-2, aunque la angustia a jugadores y aficionados locales hasta ese momento no se la quitó nadie. Y pudo haber evitado un ascenso, con lo que eso supone.